La apasionada escritora hindú Arundhati Roy se ha convertido en la más airada y rebelde de las polemistas de la India Su beligerancia la ha llevado a manifestarse en contra del bombardeo norteamericano en Afganistán, al que ha denominado "otro acto de terror en contra de la gente del mundo" Sin embargo, ha afirmado que no quiere ser conocida por su actitud de protesta, sino por sus escritos y por su novela Tampoco, a decir de lo publicado por el "New York Times", tiene deseo alguno de ser "una diva antibélica" o la "cool baby de la guerra", esto a pesar que ya ha sido estereotipada como activista feroz en contra de la construcción de grandes proyectos de presas hidroeléctricas, armas nucleares, las ultrapoderosas compañías multinacionales y, por supuesto, la guerra afgana En un artículo publicado por la norteamericana Celia W Dugger, Roy es definida, a sus 41 años, como una de las mujeres más bellas de la India, con su "pelo oscuro, sus ojos luminosos, su rostro armonioso, resaltando en la portada de las revistas que contienen sus largos y metafóricos ensayos políticos" Al mismo tiempo --enfatiza la reportera--, la escritora ha sido estigmatizada como poseedora de un gusto especial por el combate político, lo que la ha encumbrado, paradójicamente, todavía más que su única novela, el tremendo best-seller "El Dios de las pequeñas cosas", que ha vendido hasta el momento más de seis millones de copias en cuarenta idiomas, desde su inicial publicación en 1997 Centro de todas las miradas, Arundhati se ha vuelto foco fundamental de atención siempre que asiste a alguna de las protestas donde marcha furiosamente Ante su enorme popularidad, la escritora decidió demostrar que era mucho más que un lindo rostro, por lo que se cortó el cabello, casi a rape, con la cabeza plana y grandes orejas Pero ni así logró desanimar a sus admiradores y, además, potencializó aún más su proyección subversiva y beligerante, en un país que se caracteriza por una imagen femenina de misterio, dulzura y cierto sometimiento a las tradiciones ancestrales Sus declaraciones ante su nueva apariencia fueron contundentes: "No quiero ser conocida como una linda mujer que escribió un libro" Según la periodista Dugger, la reputación de "feroz independencia es vista por algunos como la clara evidencia de su enorme valor, y por otros como la muestra de su intemperancia Esto saltó a la vista cuando hace algunos días se negó a disculparse ante la Suprema Corte de Justicia de la India, la cual la acusó de desacato criminal en un caso que tiene sus raíces en su ardiente oposición al proyecto de construcción de una gran presa hidroeléctrica, que los jueces habían aprobado" Aparentemente, la Corte había ordenado la investigación detallada de ciertas acusaciones hechas en contra de Roy y otros oponentes, en el sentido de que habían intentado matar a varias personas durante una protesta realizada afuera de la Corte Indignada, la escritora hizo llegar su respuesta mediante un escrito notarizado, estableciendo que los cargos que se le imputaban eran tan absurdos que ni siquiera la policía había querido seguir investigándolos Según ella, la decisión de los jueces era "una inquietante inclinación de la Corte por silenciar la crítica y tratar de nublar la oposición, con el objetivo de intimidar con ello a todos aquellos que disintieran con sus decisiones" Furiosos, los jueces procedieron a hacer público su enojo y declarar que Roy intentaba oponerse a la ley con impugnaciones infundadas La escritora no se quedó con los brazos cruzados y, con un despliegue de fuerza, envió un nuevo escrito notarizado, donde estableció que de ninguna manera tenía semejantes intenciones, pero que al mismo tiempo "la Corte no podía restaurar su dignidad castigando o silenciando las críticas" Su respuesta fue recibida muy mal por los jueces, que no aceptaron su respuesta como apropiada, decidiendo continuar el proceso en su contra Será en enero próximo cuando se lleve a cabo la siguiente audiencia sobre el caso De resultar culpable, Roy sería consignada y pasaría seis meses en prisión Pero todo lo sucedido en la Corte no ha sido suficiente para detenerla en su lucha en contra de lo que considera como uno más de los engaños que el gobierno de Estados Unidos ha hecho para justificar sus acciones criminales En un artículo aparecido en octubre, Roy arremetió contra los norteamericanos, al señalar que Osama Bin Laden no era más que "el secreto de la familia" norteamericana, "el hijo monstruoso del apoyo que le dieron para oponerse a la invasión soviética a Afganistán: nació de la política exterior de Estados Unidos" Sus escritos señalan que las bombas tiradas por Estados Unidos sobre territorio afgano lo único que harán será expandir el odio y el deseo de venganza contra el país más poderoso del mundo Según el "New York Times", sus artículos son recibidos con gran entusiasmo en los ánimos antinorteamericanos, que "subyacen bajo la superficie no sólo en los países musulmanes, sino en la mayor parte del Tercer Mundo" Hasta el momento, la mayoría de los diarios y revistas estadunidenses han rechazado la publicación de las editoriales de Roy, pero otros, como "Le Monde" y "The Guardian", entre otros, lo han hecho con gran entusiasmo Sus ensayos, como otros más que ha hecho sobre política, reflejan lo que ella misma define como "mi obsesión por los poderosos, y los que no tienen poder alguno Soy adversaria genética de la autoridad" Según "New York Times", la madre de Roy fue una mujer consecuente con sus ideas y sentimientos, y enfrentó a la sociedad de manera clara y directa cuando decidió divorciarse del brahmán bengalí del que se había enamorado Sola con sus dos hijos, asumió la responsabilidad de hacerse cargo de ellos y de su propia vida, algo nada común en un país como la India Para cuando Arundhati tenía seis años, su madre le advirtió que nadie en su comunidad se casaría con ella y que necesitaría pensar desde pequeña en hacerse de una profesión para abrirse su propio camino en el mundo Y así lo hizo "Soy una mujer cuya abuela era golpeada en la cabeza por su esposo, hija de una madre que tuvo que vivir en el infierno de ser divorciada y tener que educar a dos hijos" Millonaria gracias a las ganancias de sus novelas, declaró: "Puedo llevar a diez hombres a almorzar y nadie se atrevería a no aceptarlo Así que no traten de jugar conmigo"