* Carlos Monsiváis, en la presentación el sábado 7 de diciembre Patricia Gutiérrez Menoyo, hija de Gutiérrez Menoyo y editora de Plaza Mayor, presentará próximamente su colección de cultura cubana en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara La colección, que tiene como objetivo publicar a autores que viven dentro y fuera de Cuba, ha sido blanco, en varias ocasiones, de la intolerancia y la incomprensión de esos polos opuestos de la política cubana que son el exilio de Miami y las autoridades de la isla Y es que ambas partes se muestran incómodas con el hecho de que se publiquen a autores de las dos orillas, a los que tachan de “gusanos” o “comunistas”, según la parte de donde vengan las críticas Entrevistada por Proceso, Patricia comentó que el año pasado en la Feria del Libro, en Cuba, las autoridades cubanas confiscaron el libro Mi Vida Saxual, biografía del gran músico cubano Paquito Rivera radicado en Estados Unidos Los cubanos de Miami, por su parte, están molestos por los libros Mitos y Leyendas en la comida afrocubana, de Natalia Bolívar, escritora que vive en la isla y por la antología de poesía de Pablo Armando Fernández, escritor también radicado en Cuba y a quien los del exilio consideran un agente del gobierno La presentación de la colección tendrá como orador principal al escritor mexicano Carlos Monsiváis y está programada para el sábado 7 diciembre Al comienzo de la misma, se les repartirá a los asistentes una rosa blanca (como la rosa blanca que cultivaba José Martí para el amigo sincero), símbolo de tolerancia, con la esperanza de que la actividad no sea boicoteada como sucedió el pasado domingo con la presentación del número 47 de la revista Letras Libres Y es que, según Patricia, con esta colección ella ha pretendido tender un puente de papel para que los cubanos que no comparten una misma geografía, al menos puedan compartir y disfrutar su cultura, que les pertenece a todos por igual Hija de Eloy Gutiérrez Menoyo --Asaltante al cuartel Moncada, Jefe del Segundo Frente en la Sierra Maestra, Fundador del Grupo Alfa 66, en Miami--, quien luchó junto a Fidel Castro y luego contra él y que estuvo preso durante veintidós años en las cárceles cubanas, Patricia dice que no le gusta que la identifiquen políticamente con su padre, porque cuando esto pasa, “todo se politiza y yo quiero ser solamente Patricia, con ideas y proyectos propios e independientes, como es el caso de esta colección, aunque esto no significa que no esté orgullosa de mi padre a quien no considero en absoluto un traidor y quien me enseñó a amar a Cuba cuando desde el presidio me enviaba cartas con dibujos de los patriotas cubanos, del indio Hatuey, de la bandera, etc “Y es que yo nací en Miami por accidente político y por eso, la colección es una forma de otorgarme yo misma la ciudadanía cubana No es que reniegue de mi ciudadanía americana, pero me resultó algo triste comprobar que hay cosas que sólo se sienten y se entienden cuando uno las absorbe directamente de la tierra en que nació, algo que comprobé en los viajes que he hecho a Cuba “Después de comer allá el tamal en cazuela y tomar batido de mamey, fue algo triste comprobar que no sabían igual que el de Miami, donde el helado es sintético, donde el maíz no estaba rayado, que el mamey, pues vete a saber: era pulpa congelada La misma hierba buena con que se hace el mojito es distinta y todo tiene que ver con la tierra de uno; ir a la casa que fue de mi madre e imaginarme a mi madre y a mi padre de novios allí y entender de dónde vengo; pasar por donde está el monumento al ataque a Palacio y ver el camión exprés donde murió mi tío Carlos, y saber que mi padre había estado allí; ir al cementerio, ver la tumba de mi tío Todo eso fue muy emocionante para mí y me hizo entender muchas cosas” De la colección de Plaza Mayor destacan títulos como Las Manzanas del Paraíso, del escritor Guillermo Vidal, considerado por la crítica como uno de los autores cubanos más importantes de la literatura cubana actual Las Manzanas es una novela donde se cuenta la historia de un adolescente que descubre su homosexualidad y donde se muestra la historia oculta del homoerotismo cubano Un canto a la tolerancia y a la libertad individual Otros títulos interesantes son la antología de cuentos Caminos de Eva Voces desde la Isla Cuentistas cubanas de hoy, donde están representadas un significativo número de mujeres narradoras cubanas, entre las que destacan Susana Haug, La Habana, 1983, quien con tan sólo diecinueve años ha despertado la curiosidad y la admiración de los críticos que se preguntan si no están ante un pequeño (altísimo en calidad) genio de las letras La colección de Plaza Mayor sobre cultura cubana es una de las más interesantes que han llegado a la Feria, puesto que muchos de sus autores forman parte de esa nueva generación de escritores cubanos llamada “los novísimos”, caracterizada por romper con la literatura anterior tanto en lo formal como en lo estético, en lo ético así como en el uso del lenguaje y los temas de sus obras Aquí, los personajes protagónicos son seres marginales, drogadictos, homosexuales, prostitutas, enfermos de Sida, toda una fauna de la que está compuesta la Cuba de hoy y que nadie antes trató con tal crudeza y desnudez Un ejemplo de esto es la novela Un Ciervo Herido, de Félix Luis Viera, que el exilio espera con expectativas y el gobierno cubano con desconfianza La novela de Viera cuenta la historia de las UMAP, esas especies de campos de concentración a lo cubano donde fueron encerrados, en los años sesenta, los individuos considerados “peligrosos” para la revolución, con el pretexto de “reeducarlos”: homosexuales, religiosos, hippies que llevaban el pelo largo (entre ellos el famoso cantautor Silvio Rodríguez), o jóvenes a quienes se les “cogió” escuchando a los Beatles, mascando chiclets o leyendo la revista española Vanidades