*"Este es un caso que no sólo ensucia a Ramos Rizo, sino a todo el arbitraje, eso le quita credibilidad al cuerpo arbitral": Horacio Elizondo México, D F, 22 de septiembre (apro)- Como una procesadora de mazorcas, los granos se desprenden a una velocidad vertiginosa La actitud avestruz de la Federación Mexicana de Futbol derivaría, tarde o temprano, en una serie de rompimientos de las alianzas que, aparentemente, el presidente Alberto de la Torre tenía afianzadas Esa política de "dejar hacer, dejar pasar" conduciría en cualquier momento al colapso Los enfrentamientos de grupos se desataron como demonios y ahora, de cualquier parte, surgen voces exigiendo los cambios que regularmente se dan en las cúpulas del poder La silla del presidente de la FMF es una de las más codiciadas, al mismo tiempo que la más inestable Que Rafael Lebrija llame "títere" al presidente de la FMF no es un insulto Es la demostración de que la mano izquierda de De la Torre para resolver todos los asuntos por la vía del diálogo no siempre funcionan La mejor medicina para prevalecer es el ejercicio del poder, sin mengua, sin división, pleno De la Torre, en su afán de ser demócrata, perdió de vista que todas las negociaciones deben terminar donde empiezan las leyes No se puede interpretar reglamentos y estatutos de acuerdo a las alianzas, sino a lo que dice cada letra de los enunciados que rigen la vida institucional de la FMF Hace años se permitió que Atlante y Veracruz pudieran participar en torneos de liga a pesar de sus deudas como afiliados de la FMF Claro: Alberto de la Torre fue blando en la aplicación de la ley porque quería alianza con Alejandro Burillo Por eso cuando aplicó "todo el rigor de la ley" contra el débil Colibríes de Cuernavaca, las molestias crecieron Y peor aún cuando, interpretado como tráfico de influencias, De la Torre permitió el registro del Atlas para el actual campeonato, a pesar de que su equipo debe dinero a Eduardo Solari, Javier Artime, Rodrigo Lemos y Alberto el "Flaco" Macías El asunto del arbitraje también le explotó en las manos por exceso de negociación Primero se dejó influir por Edgardo Codesal, quien le mostró y le hizo oír grabaciones ilegales donde Felipe Ramos Rizo acusa a la Comisión de Árbitros y a su presidente, en un rompimiento de amistad y de urbanidad porque ahora se están pegando hasta con la cubeta Bien decía el narcotraficante Pablo Escobar Gaviria: "No hay peor enemigo que alguien que fue tu gran amigo" De la Torre no supo manejar el asunto, se le salió de control y ahora la PGR interviene para investigar el asunto de las grabaciones ilegales en la casa de Ramos Rizo, en lugar de atender los reclamos nimios de Codesal, de que su examigo habló mal de su familia Para la PGR ese es un chisme, porque el espionaje telefónico es un delito Otro asunto que perturba a De la Torre es el caso de los extranjeros que se naturalizaron con documentos falsos También el asunto lo rebasó y tuvo que intervenir una denuncia de la Secretaría de Relaciones Exteriores para que la PGR interviniera Es pública y notoria la participación del promotor Guillermo Lara en el delito y De la Torre nunca se pronunció para declararlo "non grato" o para advertir a sus afiliados que no hiciesen negociaciones con Lara Finalmente, la expulsión de empleados "desleales", como él los llama (De la Torre se ve como el festejado, al que le vendan los ojos para tirar palos de ciego) que según él filtraron documentos a la revista “Proceso” para que supieran los sueldos de los jugadores Más recientemente, el galimatías de la Copa Prelibertadores, en la que impera todo menos la justicia deportiva Enredados en la política de la Concacaf y la propia, De la Torre ha ido perdiendo liderazgo ante sus afiliados Rafael Lebrija se le lanza a la yugular llamándolo "títere" al servicio de unos cuantos clubes Según los reglamentos requeriría un castigo de seis meses a un año, pero ¿intentarán otra vez la negociación en lo oscurito o aplicarán el peso de la ley? Esas acciones son las que tienen al presidente de la Federación Mexicana de Futbol cerca de la renuncia, no el complot, como él afirma