MÉXICO, D.F. (apro).- El Senado de la República aprobó reformas a los artículos 40 y 24 de la Constitución; con el primero se establece con claridad que México es una República laica, en tanto que el segundo establece la “libertad religiosa”. Ambas reformas son parte de los cambios aprobados por la Cámara de Diputados y que desde hace dos años –como en el caso de la primera–, estaba “congelado” en el Senado; la segunda se avaló el pasado periodo de sesiones. En el Senado se esperó que transcurriera la visita del Papa Benedicto XVI para evitar que se interpretara como una prebenda a la Iglesia católica. Los cambios al artículo 40 de la Constitución quedaron de la siguiente manera: “Es voluntad del pueblo mexicano constituirse en una República representativa, democrática, laica, federal, compuesta de estados libres y soberanos en todo lo concerniente a su régimen interior, pero unidos en una federación establecida según los principios de esta ley fundamental.” La reforma al 40 fue avalada con 97 votos a favor, tres en contra y dos abstenciones. Al intervenir en tribuna, la senadora del PRI, María de los Ángeles Moreno, dijo que el principio laico se establece en la Constitución. Sin embargo, en la práctica este principio se ha visto vulnerado. Prueba de ello, dijo, es la actuación del presidente Felipe Calderón durante la visita del Papa Benedicto XVI, al participar activamente en los actos masivos del jefe de la Iglesia católica e incluso comulgar en una de las misas ofrecidas. “Sin laicidad no hay democracia”, afirmó. Para argumentar el dictamen el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, Melquíades Morales, dijo que laicidad no significa de ninguna manera confrontación o negación de una religión, sino tolerancia y libertada amplia de creer y de pensar. El principio de laicidad es que determina la prohibición del Estado de establecer alguna religión oficial. “El respeto entre los individuos, independientemente de sus creencias o manera de pensar”. Por lo que ser refiere al artículo 24 de la Constitución el debate duró más de tres horas y finalmente quedó avalado el establecimiento de “la libertad de convicciones éticas”. Al final 35 perredistas, petistas y de Movimiento Ciudadano votaron en contra en contra con 35 votos mientras que PRI y PAN avalaron el cambio con 75 sufragios.