CUAUTLA, Mor. (apro).- Andrés Manuel López Obrador encabezó esta noche un mitin en Cuautla, Morelos, donde aseguró que Peña Nieto se está “desinflando” en los últimos días, mientras que su campaña va creciendo. “¿Por qué se está desinflando Enrique Peña Nieto? Porque es un globo, es chatarra”, manifestó en medio de festejos de sus simpatizantes, ante quienes repitió el mismo mensaje que ha dado en otras plazas: en el PRI están nerviosos porque su candidato presidencial se están cayendo y él va subiendo en las encuestas. El candidato de la izquierda rechazó las versiones priistas de que está enviando gente para provocarlos: “No mando a nadie, no me gusta lo sucio”, sostuvo al pedir a sus simpatizantes rechazar el odio y buscar la unidad y la reconciliación. “¿No decían que era inalcanzable? Ahí están sus encuestas, pero vamos a ver el resultado final”, advirtió el tabasqueño. López Obrador hizo un homenaje aquí a Emiliano Zapata, señalando que ahora él quiere encabezar la cuarta gran transformación del país, luego de la Independencia, la Reforma y la Revolución. Se trata, dijo, del cambio verdadero, que significa combate a la corrupción, gobernar con honestidad y un gobierno para el pueblo. También reiteró que cuando llegue a la Presidencia establecerá un gobierno austero, en el que se acabarán los privilegios de los altos funcionarios que ganan hasta 600 mil pesos mensuales. En un juego de palabras que arrancó risas de unas 3 mil personas reunidas en la plaza, el tabasqueño dijo: “Vamos a cortar el copete a los privilegios”, en alusión al persistente peinado de Peña Nieto. López Obrador llegó a Cuautla tras una gira de trabajo en Sonora. “Venimos a invitarlos a lograr una nueva época para México. “No me gana la ambición de poder ni el dinero, sino transformar la vida del país”, dijo al arrancar su largo discurso centrado en su propuesta de transformar al país con el combate a la corrupción. Aseveró que hay un grupo poderoso que no quiere el cambio y quiere seguir manteniendo un régimen caduco que ya no funciona. Es preciso, asentó, que haya esa transformación porque ahora dicen que es mejor que regrese el PRI a gobernar, porque “ellos roban pero dejan robar”. Luego recordó al llamado “obispo rojo”, Sergio Méndez Arceo, uno de los principales impulsores de la teología de la liberación, de la Iglesia de los Pobres y de las comunidades eclesiales de base. Dijo que habría que retomar el pensamiento del obispo que tenia que ver con el humanismo: ayudar al prójimo. Eso es lo que nos distingue de los animales, acotó López Obrador, al convocar a sus seguidores a no dar la espalda a la gente, incluso a panistas y priistas. Al cerrar su discurso el aspirante de la izquierda política llamó a la reconciliación y a la unidad, a combatir la corrupción que, aseveró, es el origen de la violencia.