GUADALAJARA, Jal., (apro).- En menos de seis meses, la Universidad de Guadalajara (UdeG) reportó la muerte de diez estudiantes en hechos violentos; la institución destacó que hay más víctimas de las que se reservan los nombres por motivos de seguridad. En los más recientes acontecimientos, el pasado nueve de mayo, tres de los 18 cuerpos que fueron abandonados al interior de dos vehículos localizados  a la altura de kilometro 25, de la carretera Guadalajara- Chapala, en Ixtlahuacán de los Membrillos, fueron identificados como alumnos de la casa de estudios. La institución citó otros casos como el crimen cometido contra una jovencita que los criminales “levantaron”, cuando la alumna salía de su casa y se dirigía a sus labores educativas en la preparatoria número 8, ubicada sobre Periférico Norte. Otra exalumna murió en una situación similar, en el Centro Universitario de Lagos de Moreno, hace unos meses. En esa lista aparecen cuatro estudiantes que murieron asesinados al interior del edificio de la Federación de Estudiantes de Guadalajara (FEG), en diciembre de 2011. Entre las víctimas, la universidad recordó a Itzel Adilene Rodríguez García, Magally Susana Jiménez Moreno, Francisco Javier Carrillo, Gabriel Morán Cervantes, Juan Pablo Valentín Guerrero e Ismael Gómez Saucedo. En el mismo grupo de estudiantes asesinados incluye a Carlos Jesús Martínez Delgado, Jonathan Daniel Martínez Rinas, David Martínez Velázquez, y Abel Paz Enciso. Estos alumnos fueron encontrados entre las 18 personas descuartizadas y cuyos cuerpos aparecieron en Ixtlahuacán de los Membrillos, la mañana del 9 de mayo. La casa de estudios denunció que “la inseguridad pública, la violencia y la impunidad están llegando a un grado extremo, día con día crece el número de secuestrados, ejecutados y víctimas de toda clase de delitos graves. Los ciudadanos viven acompañados de un inadmisible sentimiento de indefensión y temor”, según el documento publicado en varios diarios de circulación estatal. Demandó a las autoridades estatales el esclarecimiento de esos crímenes y la aplicación de la justicia en contra de los responsables de los homicidios y exigió al gobierno del estado hacer valer el Estado de Derecho y a cumplir su responsabilidad en materia de seguridad pública. Los diversos sectores de la comunidad estudiantil anunciaron que preparan una marcha de protesta ante los hechos de violencia, movilización que se celebrará el 23 de mayo y tendrá su acto principal en la Plaza de Armas.