MÉXICO, D.F. (apro).- En un revés a Televisa (a la cual varios realizadores han acusado de regatearles sus regalías), el juez décimo primero de Distrito en Materia Civil, Felipe Consuelo Soto, declaró la nulidad absoluta de un contrato mediante el cual el productor y actor Ernesto Alonso le cedió a la empresa televisora los derechos sobre 172 producciones, entre telenovelas y películas, por un periodo de cien años. Según el diario Reforma, Teresa Anaya López, nuera de Alonso, heredera de casi el total de sus bienes y albacea de la sucesión, fue quien interpuso la demanda contra el monopolio en abril de 2009. Entre las obras disputadas pueden mencionarse telenovelas como El Maleficio, en la cual además de producir, el actor interpretó al demonio; El derecho de nacer y la telenovela histórica Senda de Gloria. Todas generan regalías cada vez que son retransmitidas o vendidas en cualquier formato. Apenas el pasado 13 de junio la heredera logró que el juez fallara en su favor que el contrato suscrito por el actor --protagonista de “Archibaldo de la Cruz en la película Ensayo de un crimen-- tres años antes de su muerte, es contrario a la Ley Federal de Derecho de Autor, la cual no permite la cesión de derechos de este tipo por un lapso mayor de 15 años. Dice la sentencia respecto del contrato que el actor nacido en Aguascalientes en 1917 y fallecido en la Ciudad de México en 2007, firmó: “Se declara judicialmente la nulidad absoluta del contrato de cesión de derechos patrimoniales de las 172 obras literarias contenidas en el anexo A, signado el 10 de agosto de 2004, por ilicitud en el objeto, el cual no producirá efecto legal alguno. “Por ende, se destruyen retroactivamente los efectos jurídicos de dicho contrato que hubieren surtido provisionalmente.” En tanto que Anaya reclamó también el pago por daño moral y otros daños y perjuicios, Televisa fue condenada a pagar la reparación material y moral de dicho daño, y una indemnización por los daños y perjuicios causados “en razón del equivalente al 40% del precio de las regalías correspondientes a las 172 obras literarias contenidas en el anexo A del contrato base de la acción, del que se ha declarado su nulidad absoluta, lo que cuantificará en ejecución de sentencia”. Al Instituto Nacional del Derecho de Autor el fallo le ordena expedir nuevos certificados de registro por cada una de las 172 obras, y aclarar en ellos que su autor es Ernesto Alonso y que la titularidad de los derechos sobre éstas corresponde a su sucesión. Eso no es todo: Televisa también tiene una demanda interpuesta por la misma Anaya en octubre de 2009, acumulada a la primera, en la cual la nuera argumentó que entre 1998 y 2004, la empresa no pagó al productor las regalías por la explotación de sus obras, salvo algunos pagos por la venta en DVD de la telenovela La Antorcha Encendida.