MÉXICO, D.F. (apro).- El pánico volvió a las calles de la ciudad de Saltillo, Coahuila, la noche del pasado lunes 17, cuando un grupo armado atacó con granadas y disparos de arma de fuego la casa de un agente del Ministerio Público del Grupo Antisecuestro de la Procuraduría General de Justicia del estado (PGJE). En el ataque no se registraron víctimas, pero sí cuantiosos daños materiales porque los cristales de varias viviendas de la colonia Chapultepec con Los Arcos quedaron hechos trizas con la onda expansiva de los artefactos explosivos. La casa del agente ministerial ubicada en la calle Ignacio Altamirano y Arco de la Revolución registró daños cuantiosos y la fachada quedó como una coladera. También resultaron afectados dos automóviles que se encontraban cerca del lugar: una camioneta Cadillac negra y una Dodge Ram doble cabina que recibió el impacto explosivo. Minutos antes de las 23:00 horas, fue activado el Código Rojo por el ataque en las calles del fraccionamiento Los Arcos. Elementos de seguridad del GROMS, GATE y de la Secretaría de la Defensa Nacional recorrieron la zona tras los acontecimientos sin que reportaran víctimas mortales. Implementaron un cerco, desviaron el tránsito de la zona y alejaron a los curiosos para poder iniciar las investigaciones. Durante la noche, elementos de la Secretaría de Marina realizaron intensas acciones en el centro de la ciudad e instrumentaron un operativo en la colonia Topochico, donde llevaron a cabo cateos a viviendas que presuntamente eran empleadas por miembros del crimen organizado. Las calles de Constituyentes, Armillita y la Fragua fueron cerradas por elementos de la Marina Armada de México y GATES, quienes aplicaron revisiones físicas en viviendas ubicadas en el lugar.