MÉXICO, D.F. (apro).- Un incendio en una granja avícola ubicada en Mishazi, provincia de Jilin (noreste de China), dejó al menos 119 personas muertas. De acuerdo con la agencia estatal Xinhua, más de 300 trabajadores estaban en la planta cuando se produjo el incendio, al parecer provocado por una explosión de amoniaco. Alrededor de 100 trabajadores lograron escapar, pero al menos 119 no lo lograron. Según Xinhua, la puerta principal de la planta estaba cerrada con llave cuando ocurrió el incidente. “La complicada estructura interna de la casa prefabricada en la que se produjo el incendio y las salidas estrechas han añadido dificultades a las labores de rescate”, agregó la agencia. El gobierno de Jilin indicó que 54 personas resultaron heridas y fueron hospitalizadas. Los trabajadores avícolas quedaron atrapados dentro de cobertizos y enormes construcciones de concreto. Algunos sobrevivientes señalaron a la televisora estatal CCTV que el incendio comenzó justo durante el cambio de turno, a las 6:00 horas, y que al parecer se originó cerca del área de vestidores, donde había decenas de trabajadores a esa hora. Otros dijeron que escucharon una explosión y, después, una nube de humo. Las autoridades creen que el número de muertos ascenderá a medida que se revisen las diversas construcciones quemadas. En su página de Internet, el departamento de bomberos publicó un comunicado en el que atribuyó la explosión a una fuga de amoniaco. El gobierno provincial envió más de 500 bomberos y más de 270 médicos y enfermeras al lugar, y desalojó a unas tres mil personas que vivían en las cercanías, como precaución. El incendio en la planta puso al descubierto los laxos estándares de seguridad en estos lugares de trabajo. La empresa propietaria de la granja, Jilin Baoyuanfeng Poultry Co., es una importante productora de pollo procesado y emplea a unas mil 200 personas. La planta se encuentra afuera de la ciudad de Dehui, unos 800 kilómetros al noreste de la capital Pekín.