MÉXICO, D.F. (apro).- El anfitrión Brasil, que sufrió de más, alcanzó la final de la Copa Confederaciones al derrotar 2-1 a Uruguay gracias al gol de Paulinho a 5 minutos del final, en el estadio Mineirao de Belo Horizonte. La representación brasileña, que este jueves conocerá su rival durante la semifinal que disputarán España e Italia, no las tuvo todas consigo: en la primera parte el uruguayo Diego Forlán falló un tiro penal que desvió el portero Julio César. Luego Fred adelantó a los locales al minuto 41 tras una gran jugada de Neymar, cuyo disparo atajó el arquero Fernando Muslera con tan mala suerte que le cayó a Fred, quien con dificultad colocó al poste izquierdo. Así se fueron al descanso. La ventaja carioca no duraría mucho. A los tres minutos del complemento, en una jugada de rebotes, Edson Cavani le puso suspenso a la primera semifinal del certamen que por momentos hizo presagiar el inolvidable Maracanazo de 1950. Pero apareció de nueva cuenta Neymar en el cobro de un tiro de esquina que dirigió al segundo poste. Y ante la mala salida de Muslera, Paulinho saltó para anidar el esférico en las redes. Fue el gol que aficionados, el cuerpo técnico y los jugadores celebraron como si se tratara de la conquista del título. Para Brasil será la quinta final en Copa Confederaciones, en las que ha ganado en tres ocasiones (1997, 2005 y 2009). El único título que perdió fue ante México (1999).