MÉXICO, D.F. (apro).- La Procuraduría General de Justicia (PGJ) de Sinaloa confirmó que Alfredo Álvarez Zepeda, presunto operador de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, fue ejecutado a balazos en la colonia Tierra Blanca de Culiacán. Los hechos ocurrieron el pasado miércoles 10, cuando el supuesto enlace del cártel del Pacífico con narcotraficantes colombianos circulaba sobre el bulevar Universitarios junto con Jesús Jafid Macías Rivolta, de 23 años. En conferencia de prensa, el subprocurador de Justicia de Sinaloa, Martín Robles Armenta, detalló que Álvarez Zepeda y su acompañante viajaban en un automóvil Corolla de modelo reciente cuando fueron alcanzados por sujetos no identificados, quienes los atacaron con armas de fuego. El funcionario estatal precisó que en el automóvil fueron encontradas cantidades no especificadas de heroína y dinero en efectivo. Asimismo, señaló que Alfredo Álvarez Zepeda, de 36 años, fue identificado en el Servicio Médico Forense (Semefo) local por familiares directos a quienes les fue entregado el cuerpo. El presunto operador de El Chapo Guzmán había sido fichado por el Departamento del Tesoro, luego de que fue identificado como parte de la estructura de operaciones de narcotráfico y lavado de dinero. Junto con Alfredo Álvarez Zepeda, en la lista negra estadunidense fue incluido su hermano Óscar, así como Joel Valdez Benítez, de Culiacán, y el colombiano Carlos Mario Torres Hoyos por trasiego de drogas. La designación del Departamento del Tesoro prohibió a todo ciudadano y entidad de Estados Unidos tener cualquier relación financiera o comercial con los designados, y a éstos les congeló cuentas bancarias y les confiscó bienes y propiedades bajo la jurisdicción de la Unión Americana. De acuerdo con el gobierno de Barack Obama, Álvarez Zepeda, Valdez Benítez y Torres Hoyos proveían material de apoyo a las actividades del trasiego de drogas del cártel de Sinaloa, e incluso para realizar sus operaciones relacionadas con Jorge Milton Cifuentes, un narcotraficante colombiano.