MÉXICO D.F. (apro).- El Papa Francisco acaba de crear el Secretariado para la Economía, una nueva instancia que supervisará todos los asuntos económicos y administrativos de la Santa Sede y que además le rendirá directamente cuentas al pontífice, según se informó hoy en el Vaticano. El cardenal australiano George Pell, arzobispo de Sidney, será el director del Secretariado para la Economía, cuya finalidad será poner orden en las finanzas del Vaticano que han estado plagadas por escándalos de corrupción. Las decisiones de monseñor Pell serán regidas por un Consejo para la Economía, el cual estará integrado por ocho cardenales y obispos –que será un brazo religioso– y también por un grupo de siete laicos de distintos países, quienes deberán ser expertos en finanzas. La decisión papal de incluir a expertos laicos fue con el objeto de ventilar el mundo cerrado de las finanzas vaticanas, principalmente manejadas por religiosos de la curia romana. Trascendió que el Papa Francisco decidió crear la nueva instancia tras reunirse, la semana pasada, con una comisión asesora integrada por ocho cardenales, entre los que se encontraba monseñor Pell. Por el momento la estructura y las funciones del Banco del Vaticano –cuyo nombre formal es Instituto para las Obras de Religión (IOR)– seguirán siendo las mismas, por lo que no se vio afectado con la creación del Secretariado para la Economía. A través de un motu proprio (cuyo significado en latín es “por su propia iniciativa”), el Papa Francisco indicó recientemente que los activos financieros e inmobiliarios del Vaticano deben tener siempre en cuenta “la misión de evangelizar”, y particularmente a los más necesitados. De esta manera, el pontífice argentino intenta darle un giro a las finanzas vaticanas, a fin de acabar con los casos de corrupción y de lavado de dinero que tanto han dañado la imagen de la Iglesia católica.