MÉXICO, D.F. (proceso.com.mx).- Es increíble darse cuenta de que la producción de cine mexicano actual llama la atención en los mejores festivales a nivel mundial, mientras que en el propio país es todo un reto encontrar una proyección. El 4º. Festival de Cine Internacional de la UNAM cuenta, entre otras, con la sección Ahora México, la cual da foro a algunas de las mejores películas nacionales, tanto en largo como cortometraje. Abarca desde el director Michael Rowe --galardonado en el Festival de Cannes con la Cámara de Oro por Año Bisiesto (2010)-- , hasta Somos Mari Pepa (2013) -- ópera prima de Samuel Kishi. El aclamado director Pepe Valle, quien recibiría un sin fin de premios por Workers, presenta en esta sección su segunda película de ficción Las búsquedas. El filme narra la historia interior de dos personajes unidos por la muerte de sus seres queridos: Elvira, quien busca la redención y los motivos que llevaron a su esposo a quitarse la vida, y Ulises, vendedor de garrafones, quien es víctima de un robo, el cual lo lleva a emprender una búsqueda incansable por recuperar la única fotografía de su hija fallecida. Por otra parte, la muestra cuenta con el estreno mundial La mañana no comienza aquí (2014), cuarto largometraje de Iván Ávila Dueñas. Trata de dos mujeres en diferentes lugares y tiempos, que se relacionan por un misterioso hoyo que les permite comunicarte a través de sus pasiones. El manejo del sonido --como el ruido del Metro de la Ciudad de México y las resonancias naturales del campo-- son parte fundamental de la construcción espacial. González (2013) de Christian Díaz Pardo --que en el pasado Festival de Cine de Morelia obtuvo el premio a mejor actor--, es el retrato de González, un mexicano desempleado tambaleándose por permanecer en la clase media. Como último recurso para el ateo, debe entrar a trabajar en el call center de un templo Cristiano, donde la desgracia radica en venderle a otros en su misma situación --o peor-- pases “milagrosos” para salir de su miseria. Entre los cortometrajes destaca El palacio, una coproducción México-Canadá dirigida por el joven Nicolás Pereda, quien, para su edad, cuenta con una productiva carrera como realizador. Este filme poco común tiene 17 personajes femeninos, primero en actividades aisladas, luego en entrevistas en las cuales se les enseña cómo deben comportarse. Es una reflexión sobre las relaciones de poder y una crítica a la actual sociedad mexicana. Hay que apreciar que un festival mantenga un espacio exclusivo para el cine mexicano, en tanto que otros como el de Guadalajara ha optado por desaparecer un foro para este tipo de cine. La oportunidad de ver lo que hacen sus compatriotas cineastas es hasta el próximo 9 de marzo en diversas sedes. Consulte la programación en www.ficunam.com.mx.