PUEBLA, Pue. (apro).- El Frente de Pueblos en Defensa del Agua y de la Tierra Morelos, Puebla y Tlaxcala (FPDAT) denunció que con el apoyo de la Policía Federal, la empresa italiana Bonatti reinició la construcción del Gasoducto Morelos, pese a que existía un acuerdo para suspender la obra hasta el 4 de noviembre próximo. Se rompió el acuerdo firmado por la Secretraría General de Gobierno el pasado 23 de octubre, cuando pobladores de distintas comunidades afectadas por el paso del gasoducto cerraron por más de cinco horas la carretera estatal que comunica a Cholula con San Andrés Calpan, señaló en un comunicado. Aquel día, molestos porque trabajadores de la empresa –apoyados por el Ejército y las policías estatal y federal– ingresaron a los terrenos sin tomar en cuenta a los propietarios y a las comunidades, además de que destruyeron sembradíos de maíz y frijol, los labriegos amenazaron con quemar la maquinaria de la empresa si no se detenía el avance de la obra. El gasoducto forma parte del Proyecto Integral Morelos, conformado por dos termoeléctricas y un acueducto, cuya concesión fue obtenida por las empresas españolas Elecnor y Enagas, que subcontrataron a la italiana Bonatti para los trabajos del ducto de gas, que abarca 160 kilómetros. “Denunciamos que el día 27 de octubre entraron maquinaria custodiados por aproximadamente 30 policías federales en la comunidad de Zacatepec, rompiendo el acuerdo de la minuta firmada con la Secretaría General de Gobierno del estado de Puebla el día 23 de octubre, en la que se suscribe que se suspendería la obra del gasoducto desde Zacatepec hasta Nealtican”, señaló el FPDAT. Añadió: “No sólo se viola el acuerdo, sino además la actitud de la Policía Federal fue intimidatoria, amenazante y agresiva hacia compañeros de Zacatepec”. El FPDAT responsabilizó al gobierno de Puebla, a la Comisión Federal de Electricidad y a la empresa Bonatti de la seguridad física y emocional de los pobladores, e hizo un llamado al gobierno estatal para que respete los acuerdos y genere las condiciones para el diálogo estipulado en la minuta para el 4 de noviembre. Desde hace tres años los pobladores de las comunidades cercanas al Popocatépetl mantienen una lucha contra la instalación del gasoducto, con base en advertencias que han hecho expertos del Instituto de Geofísica de la UNAM y del Centro Universitario de Prevención de Desastres Regionales (Cupreder), en el sentido de que el trazo de la obra se ubica en zona de riesgo eruptivo.