Cada año se diagnostican 128 mil nuevos casos de cáncer en México
MÉXICO, D.F., (apro).- Desde 2008, el cáncer es la principal causa de muerte en México y en el mundo. En el país cada año se diagnostican alrededor de 128 mil casos, de los cuales entre 40 y 45% podrían prevenirse con un diagnóstico oportuno, según Abelardo Meneses García, director General del Instituto Nacional de Cancerología (INCan), y Bertha Ramos del Río, jefa de la carrera de Psicología de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Zaragoza de la UNAM.
Los tipos de cáncer más frecuentes en el país son el cervicouterino, superado desde 2006 por el de mama, además del de próstata, colon, estómago, ovario y linfomas.
Sólo el tratamiento de cáncer de mama durante un año implica una erogación, en promedio, de un millón y medio de pesos y “si diagnosticamos tempranamente y tratamos en forma adecuada, no rebasaría los 15 mil pesos”, afirma Meneses García.
Sin embargo, dice, 70% de las neoplasias malignas diagnosticadas en instituciones de concentración llegan en etapas avanzadas, por lo que en el INCan “tenemos el compromiso no sólo de ser receptores de esos pacientes, sino también de salir y promover la educación, prevención y diagnóstico temprano”.
Para el director del INCan es de suma importancia que en las instituciones educativas de medicina se transmitan conocimientos sobre oncología.
Actualmente, dice, “si revisamos las asignaturas de los alumnos de las escuelas de medicina del país, vemos que en las cerca de 116 instituciones de educación superior que imparten la carrera sólo ocho incluyen la materia de oncología, en algunas de ellas como optativa”.
Si bien, aclara, no pretende cambiar los planes de estudio, es importante incorporar la oncología, debido a la prevalencia de la enfermedad, su impacto social y sus repercusiones económicas para el país.
Durante la inauguración de la Semana de la Oncología, organizada conjuntamente por la FES Zaragoza y el INCan, Ramos del Río señaló que la enfermedad oncológica es un padecimiento crónico degenerativo que va en aumento entre la población, como consecuencia de una mayor expectativa de vida y de la exposición de los individuos a factores potencialmente cancerígenos.
Entre ellos los dietético-conductuales relacionados con el origen y desarrollo del cáncer, como el sobrepeso y la obesidad, el sedentarismo, decremento en la ingesta de frutas y verduras –que de alguna manera se vincula con los cambios en la alimentación de nuestras poblaciones–, consumo excesivo de tabaco y alcohol, así como la alta exposición a la radiación solar.