MÉXICO, D.F. (apro).- En mayo pasado, la inflación logró alcanzar su nivel más bajo del que se tiene registro, ya que en ese mes los precios disminuyeron 0.55%, para colocarse a una tasa anual de 2.88%, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). La reducción de las tarifas eléctricas, la baja de los productos agropecuarios, así como los limitados efectos de la volatilidad en el tipo de cambio provocaron que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se colocara por debajo de la meta planteada por el Banco de México (Banxico), que es de 3% (+/- un punto porcentual). Al interior del INPC, los genéricos que más incrementaron sus precios fueron el chile serrano, chile poblano, así como otros chiles frescos, además de la papaya. En menor medida lo hicieron la papa y otros tubérculos, la vivienda y la carne de res, entre otros. En contraste, disminuyeron los costos de la electricidad, el huevo, el jitomate, el limón, la cebolla, el pollo, los plátanos y la cerveza, entre otros. El Inegi precisó que la inflación subyacente, que incluye los precios de mercancías y servicios que no son volátiles, incrementó 0.12%, colocándose en una tasa anual de 2.88%. Mientras que la inflación no subyacente cayó 2.40% ubicándose en una tasa de 4.64% en el quinto mes del año; esta última incluye los costos de productos agropecuarios, así como los de energía. Por otro lado, el índice de precios al consumidor de la canasta básica registró una reducción mensual de 1.54% en mayo pasado, obteniendo de este modo un incremento a tasa anual de 2.63%. Y Videgaray celebra Los resultados que dio a conocer el Inegi fueron aprovechados por el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, para presumir que “desde 1970, que tenemos cifras mensuales de inflación, nunca habíamos tenido una inflación tan baja como la de hoy”. En su participación durante la Reunión Nacional de Consejeros de BBVA Bancomer, el encargado de la política fiscal dijo que “esta cifra, que sin duda se refleja en el poder adquisitivo de las familias mexicanas, representa un claro testimonio del excelente desempeño de nuestro banco central, el Banco de México, que tiene como mandato constitucional único mantener el poder adquisitivo de la moneda”. También presumió que la política monetaria claramente encuentra el apoyo de las reformas estructurales “que hoy empiezan a tener ya efectos concretos en el bolsillo de los mexicanos, en el bolsillo de las familias mexicanas, y que son ya palpables en las cifras de disminución de la inflación”.