GUANAJUATO, Gto. (apro).- Con el argumento de que existe una “relación de camaradería” con el alcalde de Silao, Enrique Benjamín Solís Arzola, el juez décimo de distrito en esta ciudad, J. Guadalupe Bustamante Guerrero, declinó resolver un juicio de amparo contra el funcionario municipal para que compareciera ante la Procuraduría General de Justicia del estado (PGJE) por el caso de la golpiza propinada a la reportera Karla Silva Guerrero, en septiembre pasado. No obstante, evitó desvincularse de otros juicios relacionados con el mismo caso, en el que estarían involucrados otros funcionarios de Silao, entre ellos el director de Seguridad Pública, Nicasio Aguirre Guerrero, actualmente prófugo. De acuerdo con la organización civil Centro Las Libres, que interpuso el amparo contra Solís Arzola, el juez décimo de distrito tiene en sus manos dos amparos promovidos por los defensores de otro de los inculpados, Jorge Alejandro Durán Fonseca, exdirector operativo de la Policía Municipal. El mando policiaco, actualmente en prisión preventiva, busca ampararse contra la vinculación a proceso por la agresión y amenazas contra Karla Silva y su compañera Adriana Elizabeth Palacios. Además, en la sala de Bustamante Guerrero se desahoga otro juicio de amparo interpuesto por el Centro Las Libres, con apoyo de los abogados de la Clínica jurídica del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), relativo a las violaciones a garantías cometidas por la Policía Municipal y sus mandos en contra de las reporteras de periódico ‘El Heraldo’ de Silao. Este martes se conoció que el juez décimo de distrito se excusó de resolver sobre la comparecencia del alcalde ante la PGJE, con el argumento de que “Benjamín Solís Arzola y el suscrito fuimos compañeros de posgrado (en la maestría en Ciencias Jurídico Penales entre 1990 y 1992), de lo que se puede inferir que existió una relación de camaradería y buen trato”. Por ello, para que no se genere “duda razonable” sobre su neutralidad, se estimó impedido de conocer ese asunto en específico.