MÉXICO, D.F., (apro).- Las comisiones de Relaciones Exteriores y de Relaciones Exteriores de América del Norte del Senado pospusieron la votación para ratificar a Miguel Basáñez como embajador de México en Estados Unidos. Tras la comparecencia del diplomático, el senador panista Fernando Salazar pidió no votar el dictamen este viernes y pidió: “dennos más tiempo para analizarlo”. La presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores de América del Norte, la priista Marcela Guerra, reviró a Salazar que hace unas semanas los propios panistas presentaron un punto de acuerdo de urgente resolución para que se nombrara al titular de la embajada de México en Estados Unidos por lo que solicitó: “Ratifiquémoslo, Miguel Basáñez cumple con todos los requisitos”. La panista y presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, Gabriela Cuevas, recordó que la embajada de México en Estados Unidos lleva seis meses sin titular y celebró que se llevara a cabo la reunión para abordar el tema, y reconoció la queja por la tardanza de seis meses en nombrar al embajador. “El Senado no quiere ser un obstáculo, no quiere ser quien dilate el tiempo”, dijo. Sin embargo, al final de la comparecencia la misma senadora manifestó: “No se someterá a votación el dictamen de ratificación del embajador, continuaremos los trabajos”. Durante la comparecencia, en la sesión de preguntas y respuestas, los senadores pidieron a Basáñez su opinión sobre las declaraciones del magnate y precandidato a la presidencia de Estados Unidos por el Partido Republicano, Donald Trump, en torno al tema migratorio. Al respecto, consideró que muy pronto el aspirante republicano tendrá que disculparse con los mexicanos “porque sabe muy bien que sus descalificaciones racistas y xenofóbicas son falsas, y que es parte de la precampaña. “Donald Trump sabe muy bien que es muy inconstante, ha cambiado cinco veces de partido y cambia de opinión las veces que sea necesario”, subrayó. También hizo referencia a la guerra contra las drogas que –dijo-- lastima “horriblemente a México”. Al respecto señaló que es necesario conformar un frente común entre los dos países para combatir el tráfico de armas. “La guerra contra las drogas nos lastima horriblemente a los mexicanos, pero entendamos que no es un problema endémico de México, es un problema de los Estados Unidos donde se da el consumo. “En México hacemos el trabajo feo, doloroso, violento, donde ponemos los muertos y contra eso también quiero trabajar y ya vimos los esfuerzos por el control del comercio de armas y de lavado de dinero”, señaló. El presidente estadunidense, Barack Obama, abundó, está convencido de la importancia del tema, “pero el cabildeo y los grupos de interés son muy poderosos y el presidente Obama no ha podido llevar adelante el tema como él quisiera. En eso México tratará de ayudarlo, así como la comunidad internacional”, abundó. Al inicio de su comparecencia, Basáñez presentó ante las comisiones un plan de trabajo de seis puntos para mejorar la relaciones entre México y Estados Unidos: una nueva arquitectura de la relación bilateral; empoderamiento de las comunidades mexicanas en los Estados Unidos; una economía dinámica y competitiva; la difusión de las transformaciones de México; una frontera segura y moderna, entre otras.