MÉXICO, D. F. (apro).- “En México, el proyecto de nación se ha desvanecido y es necesaria una redefinición para hacer realidad la inclusión y el respeto a las garantías de los indígenas”, aseguró Rodolfo Stavenhagen, doctor honoris causa por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Al dictar la conferencia magistral “La antropología mexicana: un proyecto de nación”, en la Coordinación de Humanidades de la Universidad, a propósito de su nuevo grado académico, el antropólogo y sociólogo emérito del Sistema Nacional de Investigadores (SIN) consideró que en un país que avanza lentamente para integrar a los pueblos originarios y respetar sus derechos humanos, urge que los antropólogos asuman su responsabilidad social. También especialista de El Colegio de México (Colmex) consideró –según un comunicado de la UNAM– que es cuestión de ética que los especialistas levanten la voz ante una realidad nacional en la que prevalece la desigualdad de género y los derechos humanos son ignorados. “Son problemas enraizados y continúan siendo persistentes las violaciones a los indígenas”, destacó. Desde su perspectiva, México es uno de los países más violentos del mundo y muchos integrantes de los grupos originarios son víctimas de esa situación. El académico nacido en 1932 en Frankfurt, Alemania, y nacionalizado mexicano, recordó que los Acuerdos de San Andrés Larráinzar, firmados entre el gobierno federal y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) tras el levantamiento de 1994, “siguen sin cumplirse”. Colonialismo interno Durante su conferencia, Rodolfo Stavenhagen habló del concepto de “colonialismo interno” que desarrolló con Pablo González Casanova. Se trata, explicó, del “dominio de los grupos poderosos y mestizos sobre las comunidades originarias durante el complejo proceso de la construcción de México como nación independiente”. Agregó que después de tres siglos de Colonia y uno de Independencia, se produjo un proceso de “aculturación” para la integración, que en los hechos significó la “desindigenización” del país. Al paso del tiempo, en el país se pasó de ignorar a reconocer a los indígenas en las leyes; se han hecho esfuerzos por alfabetizar para castellanizar a esas comunidades y actualmente hay intentos valiosos para reconocer al país como pluricultural y multiétnico. Y enumeró algunos esfuerzos como “las universidades interculturales; la creación del Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (INALI), que reconoce más de 67 lenguas vivas (algunas en riesgo de desaparición), y la inclusión de los derechos humanos de los indígenas en la Constitución, que significan un paso, pero aún están muy lejos de cumplirse”.