MÉXICO, DF (proceso.com.mx).- Acaba de terminar la impresión de los 882 mil boletos para asistir a los eventos multitudinarios que encabezará en México el Papa Francisco, en su viaje programado del 12 al 17 de febrero próximo. En conferencia de prensa, el coordinador de la visita, Eugenio Lira Rugarcía, señaló que los boletos se distribuirán a las 93 diócesis del país, y éstas a su vez se encargarán de distribuirlos entre sus fieles que quieran asistir a los eventos Papales. Lira Rugarcía recalcó que los boletos son gratuitos y tienen cuatro candados de seguridad, para evitar su reproducción por personas que quieran hacer negocio con la visita. El también secretario general del Episcopado dio a conocer el número de boletos que se entregarán para cada evento del pontífice. Para el acto en la Basílica de Guadalupe se entregarán 35 mil boletos; para la misa en Ecatepec, 300 mil; para la de San Cristóbal de las Casas, 100 mil; para el acto en Tuxtla Gutiérrez, 109 mil; para la misa con sacerdotes y diáconos, en Morelia, 22 mil; para el encuentro con los jóvenes, también en Morelia, 85 mil; y para la misa en Ciudad Juárez, 210 mil. Otra parte del boletaje –que no se precisó su cantidad– se entregará a las personas que asistan a los eventos en el Aeropuerto de la Ciudad de México –donde se le dará la bienvenida al Papa– y en el aeropuerto de Ciudad Juárez, donde se le despedirá. Lira Rugarcía advirtió que en los eventos papales “no habrá zonas VIP” destinadas a políticos, empresarios y personas influyentes. Detalló que estas “zonas especiales” ahora las ocuparán los minusválidos, personas de la tercera edad o quienes tengan problemas de movilidad. En la conferencia de prensa estuvo también Rafael Suárez Chávez, director de Operaciones de Vuelo de Aeroméxico, la empresa aeronáutica que transportará al Papa. Suárez indicó que dos aviones de esa aerolínea transportarán al Papa: un 737-800 con capacidad para 160 pasajeros; y un 787-8 dreamliner, para 243 pasajeros. La última aeronave será la que lo llevará de México a Roma, en su vuelo de regreso, pues en su vuelo de llegada el Papa vendrá en una aeronave de Alitalia. Suárez explicó: “Nuestros aviones de Aeroméxico no fueron modificados. Solo se les pondrá el escudo papal. Tendrán los protocolos de seguridad que requiere un jefe de Estado. Son aeronaves de la más alta tecnología y casi nuevas, pues no tienen ni un año de estar en servicio”.