TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis. (apro).- Con más de una veintena de detenidos, la mayoría docentes y unas cuatro personas ajenas al movimiento magisterial, concluyó este viernes la jornada de protesta en contra de la reforma educativa, en la que maestros y policías federales y estatales sostuvieron algunos choques en Tuxtla y San Cristóbal de las Casas. Los profesores advirtieron que si sus compañeros que hoy fueron detenidos no son liberados, no descartan que sean retenidos policías estatales y federales para intercambiarlos por sus compañeros detenidos. En el marco de los siete bloqueos a carreteras y pasos fronterizos, los incidentes violentos se limitaron a Tuxtla y San Cristóbal de las Casas, mientras en Playas de Catazajá, Cintalapa, Suchiate, Comitán y Ciudad Cuauhtémoc no se registraron incidentes, pues los maestros no encontraron presencia de uniformados. Tras la conclusión de la jornada de protestas, Pedro Gómez Bámaca y Alberto Mirón, dirigentes de la CNTE rechazaron en rueda de prensa que los maestros fueran responsables de las acciones violentas, donde hubo patrullas y vehículos quemados, así como daños en edificios públicos y privados; incluso, denunciaron la presencia de infiltrados en las protestas. Además, exigieron la liberación de los maestros detenidos esta mañana en la capital, y advirtieron que de no ocurrir, vendrá una respuesta organizada por parte de diversos sectores sociales. Luego, refrendaron su derecho a manifestarse de forma pacífica, y acusaron que grupos de choque alentados por el gobierno quemaron autos y saquearon tiendas, entre otras acciones. Entre los docentes detenidos están Robinson Jiménez Pérez, de 52 años; Sandra Roblero Escobar, 41; Vianey del Carmen Aguilar Pérez, 42; Carlos Alberto Teco Ovando, 36; Saraí Jiménez Flores, 38, y Marlene Pérez Muñoz, 39. Además, Ervin Cigarroa Ruiz, Rafael Martínez Martínez, Erica Moreno Reyes, María Cristina Hernández, Carmen León Ramos, Refugio de Jesús Flores Calvo, Fausto Domínguez Gonzáles y José Luis Pérez Morales, de 38 años, así como Yuri del Carmen Pérez, 30, y Estela Martínez Santiago, de 41 años. Todos ellos de las secciones 7 y 40 de la CNTE. De otras personas detenidas no se tiene información precisa si son o no docentes, aunque fueron identificados como Pedro Camacho Ocaña, de 45 años; Rodrigo de Jesús Alegría Vázquez, 18, y María Isabel Bedran Penagos, de 50 años. También fueron capturados José Agustín López Santís, de 31 años, así como un instructor de un gimnasio que caminaba cerca de donde fue se enfrentaron maestros y policías. De igual forma fueron detenidos Andi Abenamar Elizaldi Penagos, de 21 años, y Jorge Fernández Ortega, 39, y oficio repartidor de agua en pipas. Ante estas capturas, Gómez Bámaca y Mirón dijeron que como CNTE se encuentran en estado de “alerta máxima”, y que será la asamblea estatal permanente la que este sábado 16 decida qué acciones realizar para exigir la libertad de los docentes. El gobierno estatal, a través de la Secretaría de Educación, dijo en una misiva que, en la mayoría de los centros escolares del sistema federal y estatal, los maestros se presentaron a laborar. Sin embargo, admitió que “un pequeño grupo de maestros pretendió bloquear los accesos en diferentes regiones del estado, por lo que esta secretaría lamenta que sea el ejercicio de la violencia y no el diálogo lo que permita construir propuestas a las inconformidades expresadas”. Por su parte, César Espinosa Morales, presidente del Comité Ejecutivo Estatal (CEE) del PRD lanzó una llamado a las autoridades para encontrar una solución al conflicto magisterial, donde se han registrado distintas manifestaciones en contra de la reforma educativa. El dirigente perredista destacó que a nadie conviene la confrontación, pues se cancelan las oportunidades de desarrollo y las posibilidades de reducir la desigualdad en la que está inmerso el estado, especialmente en el tema de educación en comparación con otras entidades del país. En tanto, el Comité de Derechos Humanos de Base de Chiapas Digna Ochoa condenó “estos graves hechos de represión cometidos por las policía Federal y estatal en contra de los maestros de la CNTE”, y responsabilizó directamente al gobernador Manuel Velasco, quien con esta decisión “ha generado una situación que ha expuesto en su vida, integridad y seguridad personal a miles de chiapanecos, y agrava la ya profunda crisis social, política y de derechos humanos que se vive en la entidad”.