CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) condenó el linchamiento de dos presuntos secuestradores y las lesiones producidas a uno más, por parte de pobladores de Santiago Atlatongo, municipio de Teotihuacán, Estado de México, el miércoles pasado. En un comunicado, el organismo subrayó que los actos de linchamiento o la justicia por propia mano “reflejan la pérdida de valores y muestran la violencia extrema de aquellos que exigen justicia pero se apartan de las normas de convivencia legales y actúan fuera del estado de derecho”. Las conductas de una sociedad, abundó, no tienen justificación cuando se falta al acatamiento de la ley y se recurre a vías indebidas para aplicar justicia. El organismo señaló además que la libertad de cualquier comunidad del país está establecida en los principios de la Constitución “que nos rige a todos” sobre el respeto a los derechos humanos y, sobre todo, a la vida, dignidad e integridad de las personas. “La CNDH rechaza toda forma de violencia al margen de la ley y solicita a las autoridades competentes locales y estatales, investigar y sancionar conforme al ordenamiento normativo aplicable”, apuntó la CNDH en su comunicado. Asimismo, llamó a la sociedad a construir una cultura de la legalidad de manera conjunta y dejó en claro su posición respecto quienes cometen delitos como los presuntos secuestradores linchados, al señalar que “quien cometa delitos como los que se les atribuyen a las personas golpeadas y asesinadas debe ser procesado y aplicársele, de ser el caso, el máximo rigor y sanción, pero la justicia por propia mano nunca será la opción para resolver presuntos actos delictivos. “Todos debemos apegarnos dentro del marco de la ley, único instrumento que tenemos como sociedad para normar la convivencia y las relaciones sociales”, concluyó.