CIUDAD DE MÉXICO (apro).-El gobernador perredista de Morelos, Graco Ramírez, aseguró que el escándalo de una “fosa común, no clandestina” -insistió- no será impedimento para que levante mano en los próximos comicios presidenciales del 2018. "No me limites, no me limites", dijo Ramírez al insistir que buscará la candidatura presidencial para suceder a Enrique Peña Nieto. Para ello, abundó, buscará alianza con otra institución política y no descartó que pueda ser el Partido Acción Nacional (PAN). Durante la reunión plenaria del grupo parlamentario del PRD, a la que asistieron los gobernadores electos de Quintana Roo, Carlos Joaquín González; el de Veracruz, Miguel Ángel Yunes; de Oaxaca, Gabino Cue, y el de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, entre otros, Graco Ramírez detalló que las fosas de Tetelcingo fueron un "batidero" de la pasada administración y que ya es un "tema aclarado" que no tendría por qué interferir en sus aspiraciones político-electorales. Apresurado por su jefe de prensa, para que no fuera increpado por los medios nacionales, Graco Ramírez propuso debatir sobre la legalización de la marihuana y los matrimonios entre personas del mismo sexo, para contribuir a una sociedad democrática y de vanguardia. El mandatario morelense se mofó de que el exfutbolista y alcalde de Cuernavaca Cuauhtémoc Blanco haya sido exhibido por condicionar siete millones de pesos para aceptar la candidatura a la alcaldía por el Partido Social Demócrata. "Espero que la gente se haya dado cuenta de a quién eligió", apuntó.