CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Un viaje en el tiempo hacia épocas ochenteras se sintió en el Auditorio Nacional con los conciertos Rock en Tu Idioma Sinfónico, donde resurgieron Los Caifanes, Amantes de Lola, Neón, Bon y los Enemigos del Silencio, Rostros Ocultos y Fobia. Una intensa lluvia caía en la Ciudad de México mientras el foro de Reforma se encontraba totalmente lleno para escuchar este proyecto cuya idea original es de Sabo Romo de Los Caifanes, donde mezcla aquellas canciones que hicieron historia en el rock en español con una orquesta en vivo. El recital se dividió en dos partes: la primera con una tradicional banda de rock, integrada por Romo en el bajo, Jorge Chiquis Amaro en la batería, y en las guitarras Gasú Siqueiros, de Amantes de Lola, y Arturo Ybarra, de Rostros Ocultos. La segunda parte fue con el acompañamiento de la Camareta Metropolitana, bajo la batuta de Felipe Pérez Santiago y el coro Euterpe. Cerca de las 20:45 la apertura llegó con Viento de Caifanes, la cual cantó Sabo con la aceptación inmediata de casi 10 mil personas que transformaron el Auditorio Nacional en aquellos antros de rock de esa época: el Rockotitlán o el Rock Stock. Una larga lista de vocalistas invitados calentaba el show, que arrancó con Leoncio Lara Bon, de Bon y los Enemigos del Silencio, quien interpretó Parecemos monitos, al que le siguió Kazz, de Amantes de Lola con Mamá, y Neón, con No hay nada eterno. Los gritos de las mujeres se los llevó Leonardo de Lozanne, de Fobia, a quien se le vio contento ante tal recibimiento y cantó el El microbito; mientras Piro, de Ritmo Peligroso, hizo lo suyo con Déjala tranquila, y Marciano Cantero, de Los Enanitos Verdes chilenos, con aclamada bienvenida para Yo te vi en un tren. Sabo Romo, como buen anfitrión, recibió uno a uno a los cantantes, además se mostró muy amable en todo momento con los espectadores, al reconocer que en más de 30 años en la escena del rock “no he tenido nada que sacrificar” como músico. Cercanas las 21:30, el bajista de Los Caifanes sutilmente enunció: “Déjense llevar por el alucín de los acordes”; mientras bajaba un telón para mostrar a la Camareta Metropolitana y el coro Euterpe. Sin caer en la solemnidad orquestal, la parte sinfónica inició con Mátenme porque me muero, llevada por Romo, siguiendo Voy a buscar con Bon al frente; además de Beber de tu Sangre, con Kazz, siendo una de las más queridas por las almas rockeras. Sergio Santacruz y Humberto Calderón, de Neón, tocaron Juegos de amor y un cover a Miguel Mateos: Es tan fácil romper un corazón, refrito que corearon al unísono los presentes, quienes también se entregaron del mismo modo a Marciano Cantero para La muralla verde. Unos fans apasionados de principio a fin fue la constante que prosiguió con Lobo hombre en París, original del grupo La Unión y que entonó Piro, dando cátedra rockera junto a una orquesta. En esta ronda de presentaciones llegó el turno a Leonardo de Lozanne con El diablo; para dar paso a Cala, de Rostros Ocultos, quien reventó los ánimos con Kumbala, tema de La Maldita Vecindad y que a nivel sinfónico cautivó con un fondo de violines al estilo clásico. Después de un largo mensaje de despedida y agradecimientos por parte del noble bajista Sabo Romo a cada uno de los que hicieron realidad su proyecto Rock en Tu Idioma Sinfónico, fue que apareció todo su conjunto de invitados: Bon, Kazz, Neón, Piro, Marciano, Leonardo y Cala, listos para dar el último cántico, casi las 23:00 horas. “Ya nos tenemos que ir al asilo y a ustedes les cierran el metro”, bromeó Romo. Y a manera de homenaje al rocker argentino Gustavo Cerati (1959-2014), entonaron la rola Cuando pase el temblor, que es uno de los referentes que marcaron la generación del proyecto disquero Rock en Tu Idioma, dejando satisfechos a sus seguidores, quienes asistieron además el 25 de agosto al Auditorio Nacional para una segunda tocada. (Con información de César Muñoz Valdez)