Carnaval de los Animales y Canek

jueves, 20 de octubre de 2016 · 20:59
GUANAJUATO, Gto. (Proceso).- Dentro de las actividades del Festival Cervantino, nos encontramos, en esta primera jornada, un par de propuestas llamativas de teatro para toda la familia: Carnaval de los animales, de Australia, y Canek, del colectivo Luna Morena de Jalisco, país y estado mexicanos invitados. La escena europea está presente con la Compañía Sud Costa Occidentale de Italia y Els Joglars de España, y de teatro nacional hablaremos de la obra Dos hombres en la mina, de Teatro Universitario de la Universidad de Guanajuato, que se representa en una mina a cincuenta metros bajo tierra, y Quijote, vencedor de sí mismo, de la Compañía Teatro de Ciertos Habitantes. Las puestas en escena son disímbolas en cuanto a su temática y a su estética, y provienen de compañías consolidadas que han dejado de lado los grandes formatos para trabajar con un mínimo de elementos escenográficos. Carnaval de los animales, de la compañía Circa, despliega, a través de la sencillez anecdótica, un muestrario humano y circense de animales construidos entre los actores a partir de gestos, movimientos y divertidos conjuntos humanos. Con imágenes de video apoya la ficción del capullo donde se posa una actriz para convertirse en mariposa o de un mar con peces grandes y chicos de los que otros actores se desprenden hacia el escenario. La propuesta escénica es virtuosa en su interpretación y se queda divertimento festivo. En Canek se retoma una leyenda maya escrita como novela por Emilio García Abreu y es dirigida y adaptada por Miguel Angel Gutiérrez. En ella, el espíritu de la libertad es lo que conduce a los personajes. Con una buena técnica y una atractiva estética, utilizan muñecos que manipulan y prestan su voz para contar la historia de un niño en la primera parte; y en la segunda se apoyan del teatro de sombras para resolver escenas climáticas de la lucha de un pueblo, por lo que parecen ser dos obras. Dos hombres en la mina es una gran experiencia porque compartimos, al interior de la mina de El Nopal, la vivencia de dos mineros que han quedado atrapados después de un derrumbe, y nos sumergimos en su desesperación. La obra de Ferenc Herczeg, adaptada y dirigida originalmente por Enrique Ruelas, se presenta desde hace años en el festival. Es protagonizada por actores de trayectoria como Hugo Gamboa, quien también la dirige en esta reposición y Rubén Araujo, los cuales hacen crecer la verosimilitud de la situación, aunque a momentos al segundo no se le entienda del todo. Está aderezada con actores de la universidad que vemos trabajando o heridos al inicio de la función. En esta ocasión Claudio Valdés Kuri dirige una propuesta sobre El Quijote que inicia siendo un monólogo en el que el personaje cobra vida a través de un libro. Con un brillante inicio, la obra se va desdibujando lo mismo que el personaje que protagoniza Fernando Huerta, quien requiere impostar y exagerar su interpretación para ir acorde a la potencialidad de un personaje como Don Quijote. La autora Mónica Hott y el director trabajan la improvisación al incluir a los espectadores en ciertas partes, y después incorporar a la actriz Xóchitl Galindes, ubicada entre el público, como el contraste con el presente. Aunque con momentos divertidos e ingeniosas resoluciones, la pieza se vuelve didáctica y endeble. La propuesta que trae Els Juglars, V.I.P, es una gran farsa sobre los niños que se convierten en los tiranos de los padres. Es una crítica dura hacia la enajenación tecnológica, la indiferencia y la prepotencia infantil, realizada con cuadros y situaciones pequeñas que se quedan en un impacto más que en un enriquecimiento de la problemática. Por su parte, Las hermanas Macaluso, de la Compañía italiana Sud Costa Occidentale, dirigida por Emma Dante, es una obra entrañable que parte de un entierro para dar vida a ocho hermanas que reviven momentos familiares donde la vida y la muerte se entremezclan. Con personalidades definidas, las mujeres se entregan lúdicamente a revivir lo que fueron desde la sencillez escénica.

Comentarios