MORELIA, MICH (Proceso.com.mx).- Ante la polémica que en Chile ha causado “Neruda”, el largometraje de Pablo Larraín --porque no se apega a los hechos reales que sufrió el poeta Pablo Neruda cuando lo perseguía el gobierno de Gabriel González Videla con 300 policías-- el actor Luis Gnecco, quien recrea al Premio Nobel de Literatura 1971, reveló que esperaba esa disputa: “Sabía que el largometraje provocaría discusión, que iba a ser difícil. Neruda es muy querido. Hay un poco de prejuicio porque fue burgués y estuvo muy cercano al pueblo. Pero la cinta es una ficción que toma una parte de la vida del poeta, pero en Chile somos así, no nos gusta lo que hacemos.” “Neruda”, que inauguró la noche de ayer la 14 edición del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), se ubica en 1948, cuando el senador Neruda acusa al gobierno de traición y es desaforado por el presidente González Videla. Entonces el policía Óscar Peluchonneau es el encargado de arrestar al intelectual. Neruda trata de huir del país con su esposa, pero la pareja se ve obligada a esconderse. En la lucha con su enemigo Peluchonneau, Neruda encuentra una oportunidad para reinventarse a sí mismo y convertirse en símbolo de libertad y leyenda literaria. Gnecco manifestó tajante: “Me quedo con este Neruda que inventamos en el filme, un Neruda muy íntimo y excesivo”. García Bernal, quien personifica al policía, antes de la proyección de Neruda leyó partes del poema que Neruda le escribió a México, titulado México, México, en homenaje al presidente Lázaro Cárdenas. “Porque México quiere decir esperanza y futuro. México quiere decir alegría”, leyó. Y comento al final: “¡Qué difícil decir México en estos momentos, decir ‘México quiere decir alegría’. Es como si comiéramos un poco de vidrio molido también al decirlo, por tanta incompetencia de tantos gobernantes, es difícil decir que México quiere decir alegría, pero es lo que queremos decir.”