VILLAHERMOSA, Tab. (apro).- Aunque con escasa asistencia, por tercer día consecutivo hubo manifestaciones de protesta en la entidad contra el alza del precios de las gasolinas y diésel. A la par, aumenta la venta clandestina de combustible presuntamente robado, a 10, 11 y 12 pesos el litro, principalmente en los municipios de Cárdenas, Huimanguillo y Cunduacán, ubicados en la región de La Chontalpa. El alcalde de Cárdenas, Rafael Acosta León, prevé que se incremente la ordeña de ductos de Pemex y la venta ilegal de gasolina, por lo que solicitó a la Procuraduría General de la República (PGR) y a Pemex incrementen operativos contra el mercado negro de combustibles. En la tercera jornada de protesta contra el gasolinazo, alrededor de 30 personas tomaron hoy una estación de servicio en Paseo Tabasco de esta capital, e impidieron por más de dos horas la venta de combustibles. Con pancartas y consignas de “No al gasolinazo”, “Todos a la resistencia civil”, los manifestantes, encabezados por extrabajadores petroleros, exigieron la renuncia del presidente Enrique Peña Nieto por mentir a los mexicanos al ofrecer que no aumentaría el costo de las gasolinas y ocurrió todo lo contrario. Desde el lunes anterior, las protestan se han concentrado en gasolineras de los municipios de Centla y de esta capital, aunque con asistencia de entre 10 y 20 personas. No obstante, la inconformidad escala y para el próximo viernes 6 la Comunidad Artística de Tabasco está convocando en redes sociales a protestar frente a la llamada Pirámide de Pemex, donde se ubican las oficinas de Pemex Exploración Producción (PEP) en Villahermosa. El secretario de Seguridad Pública (SSP), Jorge Aguirre Carbajal, advirtió que no se permitirá que las protestas contra el gasolinazo sean vandalizadas. “Si hay vandalismo hay que actuar, cumpliendo con los derechos humanos y de forma legal, estamos alertas”, manifestó e informó que, hasta el momento, las protestas han estado “tranquilas” y sin bloqueos carreteros. En tanto, crece la venta clandestina de gasolina Magna a 10 pesos litros, a 11 la Premium y a 12 el diésel, presuntamente robada y distribuida a la vista de todos. Medios locales ilustran con fotografías casas donde hay carteles con aviso de “hay gasolina”, principalmente en Cárdenas, segundo municipio en importancia de la entidad, así como en Huimanguillo y Cunduacán, pertenecientes a la región de La Chontalpa. Según el diario Tabasco Hoy, reportes policiacos ubican cinco puntos de venta clandestina de combustible en poblados de Cárdenas y Huimanguillo, conocido como “el corredor de la ordeña”, donde son recurrentes los robos de pipas con gasolina y ordeña de ductos de Pemex. En Cunduacán, donde el pasado 25 de noviembre explotó un depósito clandestino de gasolina y causó tres heridos graves por quemaduras, los clandestinos de combustibles se han duplicado de 10 a 20 en todo el municipio. En ese escenario, el alcalde perredista de Cárdenas, Rafael Acosta León, alertó sobre “el riesgo” de que incremente el robo y venta ilegal de gasolinas en La Chontalpa. “Hacemos un exhorto a la Comisión de Seguridad de Petróleos Mexicanos y a la PGR para que lleven a cabo una mejor vigilancia”, demandó. También dijo que en toda la zona rural de Cárdenas operan quienes se dedican al robo y venta ilegal de combustible, y que otro riesgo son las explosiones en las casas y locales donde se almacena el combustible hurtado. La ordeña de ductos de Pemex y de pipas asaltadas han provocado tragedias como la explosión ocurrida en marzo de 2015 en el poblado Zapotal San Miguel, del municipio de Huimanguillo, con saldo de 21 personas muertas por quemaduras.