CIUDAD DE MÉXICO (apro).- A un día de que el Parlamento de Grecia vote las reformas para cerrar la segunda revisión del programa de rescate, que desbloquearía un fondo por 86 mil millones de euros para obtener una nueva ayuda financiera, los principales sindicatos públicos y privados convocaron a una huelga nacional que provocó que los servicios de ferry, buses y trenes fueran interrumpidos, y los funcionarios y médicos también dejaron de trabajar. El paquete legal incluye un nuevo recorte a las pensiones en 2019 y la disminución de las exenciones tributarias para ahorrar el equivalente a 2% del Producto Interno Bruto (PIB). Un grupo de personas que salió a las calles del centro de Atenas a protestar fue dispersado con gases lacrimógenos lanzados por la policía, y algunos respondieron con petardos, según un despacho informativo de la agencia Reuters. Grecia acordó este mes realizar nuevos recortes de gastos para desbloquear las conversaciones con los acreedores, y una vez que se aprueben estas nuevas medidas, los ministros de Finanzas de la eurozona discutirán el desembolso de fondos en la siguiente reunión programada del Eurogrupo, el próximo lunes 22. Atenas necesita los fondos urgentemente para pagar la deuda de 7 mil 500 millones de euros (8 mil 180 millones de dólares) que vence en julio. El país helénico ha necesitado tres préstamos de miles de millones de euros desde 2010, y los recortes adicionales son un tema polémico para el primer ministro Alexis Tsipras, elegido por primera vez en 2015 con el compromiso de terminar con la austeridad, pero fue obligado a ceder meses más tarde para aceptar un nuevo paquete de rescate para evitar la bancarrota.