Canciller de Venezuela denuncia agresión a diplomáticos y exige respuesta a Videgaray

lunes, 19 de junio de 2017 · 10:15
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, denunció ataques a la la delegación de su país en la sede de la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA), en Cancún, Quintana Roo, por parte de “extremistas” y acusó al gobierno mexicano de permitir las agresiones. De acuerdo con una serie de mensajes publicados por la canciller en su cuenta de Twitter la noche del domingo pasado, el vicecanciller Samuel Moncada y la embajadora Carmen Velásquez, sufrieron agresiones y ataques a su llegada a la sede de la asamblea de la OEA que se celebra en Cancún. Y acusó a Luis Florido, diputado por Lara; Gustavo Tovar, activista de derechos humanos y al periodista William Dávila de ser los promotores de la violencia. Responsabilizó al secretario general de la OEA, Luis Almagro, y al secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, de la integridad física de los diplomáticos venezolanos que se encuentran en Cancún para atender la Asamblea General. En otro tuit publicó una fotografía en la que denuncia que Almagro platica con los agresores de los diplomáticos venezolanos. En otro mensaje señaló que el gobierno mexicano debe aclarar si apoya “a los violentos” que están en Cancún para atacar a la delegación venezolana. El vicecanciller venezolano para América del Norte, Samuel Moncada, acusó al gobierno mexicano de ser "cómplice" de las "agresiones verbales" y "amenazas de golpes" que recibió de "extremistas" de su país el domingo pasado a su llegada al hotel sede de la Asamblea General. “Es cómplice porque les advertimos de que había habido amenazas y de que debíamos tener más protección y porque permitieron las condiciones para que extremistas fanáticos venezolanos vengan a agredir a la delegación venezolana por permitir que se infiltren", dijo Moncada en declaraciones a EFE Almaguer y Videgaray minimizan el altercado Cuestionado sobre el incidente diplomático en el noticiero Despierta con Carlos Loret de Mola, Luis Videgaray Caso dijo que Cancún es un lugar turístico y no se puede detener el flujo de los visitantes y que la OEA no puede realizar ningún tipo de amonestación contra Venezuela. Añadió que el gobierno mexicano tiene una postura de “absoluto respeto” a la soberanía de Venezuela pero que México apoya encontrar solución a "una crisis dramática en términos humanitarios, en términos económicos y también una crisis política de deterioro severo de las instituciones". Videgaray afirmó que México quiere ser parte de la solución de una manera "constructiva, a través de la diplomacia". En el mismo espacio televisivo, el secretario general de la OEA, minimizó el altercado entre el embajador de Venezuela ante la OEA, Samuel Moncada, y el activista Gustavo Tovar Arroyo. En su opinión fue "recreación muy leve, muy liviana, de lo que está pasando en Venezuela, donde van 73 personas que han sido asesinadas en manifestaciones, donde ha habido alrededor de mil detenidos, donde hay casi 300 presos políticos". Y afirmó que la OEA busca impulsar acciones inmediatas para hallar una solución de la crisis social y humanitaria en Venezuela. "Los 73 muertos (en manifestaciones en Venezuela) nos obligan a la acción inmediata y a proponer los caminos de solución y la agenda para la solución del problema venezolano", dijo. Comentó que entre las soluciones propuestas por la OEA está realizar elecciones libres y democráticas, liberar a todos los presos políticos y abrir un canal humanitario para resolver la falta de medicinas y de alimentos. "El problema venezolano, como toda salida de una dictadura, tiene que enfocarse en el hecho de haber elecciones, todas las dictaduras se salen por elecciones, no hay otro mecanismo", afirmó. "Una dictadura remplazada por otra dictadura, no es un esquema de solución democrática", subrayó. Y advirtió que seguirán denunciando el deterioro de las instituciones en Venezuela, la falta de independencia de los poderes de Estado, la cooptación del poder judicial por el ejecutivo, la tortura de los presos políticos, los asesinatos de manifestantes y la “grave” crisis social y humanitaria en el país sudamericano.

Comentarios