CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El Papa Francisco lamentó hoy las “terribles olas de persecución y de tribulaciones” que padecen las comunidades cristianas asentadas en Medio Oriente, debido al “terrorismo fundamentalista” de esa región. Durante una audiencia sostenida con los integrantes de la Reunión de las Obras para la Ayuda a las Iglesias Orientales (Roaco), el pontífice señalo que, especialmente en Siria y Egipto, estas comunidades católicas “ven a sus hijos sufrir” a causa de las guerras y de las “insensatas violencias perpetradas por el terrorismo fundamentalista”. Y elogió la labor de los sacerdotes y seminaristas que, a pesar de estas duras condiciones, permanecen en esas regiones para llevar el Evangelio a esas poblaciones que “son puestas a prueba”. Francisco recalcó que la sangre derramada por los cristianos de esas regiones son un “sello de su testimonio”. Y por último, pidió para que, en caso de que estos católicos sean orillados a emigrar a otros países, se les reciba hospitalariamente a donde quiera que lleguen.