MONTERREY, NL (apro).- El exgobernador Rodrigo Medina debió sentarse hoy otra vez en el banquillo de los acusados, ahora para responder a la acusación de peculado, por el uso indebido de helicópteros a título personal durante su gestión. Antes de ingresar a su cita con la justicia, el ya procesado mandatario dijo que tenía la conciencia tranquila y que los señalamientos que se le hacen son por motivos políticos. “He estado dando la cara y, sobre todo, atendiendo a los mandamientos del Poder Judicial y de la Subprocuraduría, porque es nuestro deseo atender esto lo antes posible y que no haya distracción enorme de recursos y esfuerzo humano en algo que realmente tiene más tintes políticos que técnicos”, buscó justificar. En la audiencia de imputación celebrada este viernes, la fiscal Erika Irigoyen, de la Subprocuraduría Anticorrupción del estado, presentó ante el juez de control Jaime Garza Castañeda bitácoras de al menos 18 vuelos que el priista hizo para desplazarse a su rancho en el municipio de General Terán. La agente ministerial alegó que, con base en estos documentos y por testimonios de los pilotos, se estableció que Medina hizo esos recorridos de 100 kilómetros al norte de la capital con fines recreativos, principalmente los fines de semana, para desplazarse con su familia y amigos para estar en su propiedad. Por su parte, la defensa señaló que Medina de la Cruz utilizó el medio de transporte a disposición del gobierno estatal por motivos de seguridad, pues en el tiempo en que fue gobernador la violencia se había recrudecido en la entidad, particularmente en las carreteras fuera de la zona metropolitana. Hasta las 21 horas de este viernes, el juez de control se encontraba en receso deliberando sobre la vinculación a proceso al mandatario o por su exoneración de los cargos que le presentó la Fiscalía Anticorrupción en Nuevo León. Por delitos similares, relacionados con el uso ilegal de helicópteros, ya fue imputado y vinculado a proceso quien fuera director de Protección Civil en su sexenio, Jorge Camacho Rincón, que enfrenta delitos por daño al patrimonio del estado y ejercicio indebido de funciones y por sobrefacturación de las rentas, que le habrían costado al erario un quebranto de 613 millones de pesos. Actualmente Rodrigo Medina está vinculado por tres delitos: ejercicio indebido de funciones, peculado y daño al erario por presuntos estímulos fiscales por 3 mil 600 millones de pesos entregados ilegalmente a la armadora coreana KIA, instalada en la entidad. La Fiscalía también notificó al exgobernador que prepara imputaciones por enriquecimiento ilícito y peculado, pues la Contraloría estatal encontró que, en sus declaraciones patrimoniales, dio constancia de menos bienes de los que realmente posee. El zar anticorrupción, Ernesto Canales Santos, dijo que actualmente existen por lo menos 45 expedientes integrados contra Medina, que se irán desahogando en el transcurso de los meses siguientes.