SALTILLO, Coah. (apro).- Periodistas de Tamaulipas, Nuevo León y Coahuila exigieron al presidente Enrique Peña Nieto y al titular de la Secretaría de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, que investiguen los amenazas contra la reportera Jessica Rosales por parte de Julio César Aldape, dirigente del Partido Joven. La Red de Periodistas del Noreste e integrantes del gremio de los municipios de Saltillo, Ramos Arizpe, Monclova, Torreón, Sabinas, Acuña y Piedras Negras demandaron a las autoridades federales y al gobernador Rubén Moreira Valdez, “garantías para ejercer el periodismo”. En su cuenta de Facebook, César Aldape exigió a la periodista que no vuelva a emitir una opinión, de lo contrario, “vas a ser mi juguete judicial hasta que se me antoje… mera diversión”. Anteriormente el líder del Partido Joven había expresado comentarios misóginos tras el asesinato de la joven Mara Fernanda, en Puebla, señalando que ella se lo buscó por andar sola en la madrugada. Sus comentarios desataron críticas en los medios, una de las cuales fue redactada precisamente por Jessica Rosales en su columna del diario Heraldo de Coahuila. Como respuesta, Aldape le advirtió que se “divertiría” con ella en los tribunales. “El gremio periodístico de Coahuila se suma a organismos locales, nacionales e internacionales que se han pronunciado para exigir a las autoridades que investiguen el amedrentamiento y las amenazas vertidas en éste y en todos los casos que están sin resolverse”, detalla un comunicado firmado por los periodistas de Coahuila. De igual manera, exigen “acciones de protección necesarias para salvaguardar la integridad física de todos los periodistas y sus familias que en el ejercicio de la profesión son agredidos por políticos y servidores públicos de los tres niveles de gobierno”. De acuerdo con los reporteros, Aldape ha salido impune de otros delitos y presume de tener influencias con el gobierno de Coahuila. En las pasadas elecciones, el Partido Joven postuló a Humberto Moreira como candidato a diputado local por la vía de representación proporcional, pero no alcanzó los votos suficientes, y el hermano del actual gobernador se quedó con las ganas de una curul.