CIUDAD DE MÉXICO (apro).- De octubre de 2016 al mismo mes de este año murieron 85 personas en situación de calle en la Ciudad de México; de ese total, 29 casos -30%- fueron derivados de actos de violencia y homicidios dolosos, según el informe anual de la asociación civil El Caracol. En tanto, 50% de las víctimas fallecieron por enfermedades como hipocalemia, es decir, niveles bajos de potasio en la sangre, e hipotermia. Del total, 12 eran mujeres, cinco menores de edad, explicaron los representantes de la organización en conferencia de prensa. Tales cifras fueron obtenidas con ayuda de LaData.mx, cuyo analista, Daniel Gómez, destacó que ese porcentaje de 30% “nos llama la atención porque quiere decir que incrementó el número de muertes por terceras personas”. Luis Enrique Hernández, director de El Caracol, -organización especializada en atender a este sector vulnerable de la población-, señaló que “el 2017 está siendo paradigmático para las poblaciones callejeras, ya que hay diferentes tendencias de eventos violentos hacia ellas”. Además, dijo que es relevante la violencia contra las mujeres de este grupo vulnerable, pues incluye a menores y hasta se tiene el registro de una bebé de meses que perdió la vida por asfixia. El problema se agrava, añadió Hernández, porque no existen indicadores para cuantificar a la población en situación de calle, además de que hay carencia de mecanismos de identificación que eviten que los cuerpos sean enviados a la fosa común. Tan sólo de los 85 casos documentados este año en la ciudad, en 63% se desconoce el paradero de los cadáveres. De acuerdo con el informe de El Caracol, la constante discriminación de los servidores públicos y población en general contra esta población impide el acceso a los servicios a los que cualquier capitalino tiene derecho. Las delegaciones con más casos son Cuauhtémoc, Venustiano Carranza y Gustavo A. Madero, las cuales señaló la Secretaría de Desarrollo Social local (Sedeso) como “cinturones de población callejera a atender” en su censo presentado en julio pasado. Luego de difundir los resultados del estudio, el director de El Caracol pidió al gobierno de la Ciudad de México garantizar el derecho a la identidad de esta población. A la Procuraduría General de Justicia (PGJ-CDMX), al Tribunal Superior de Justicia de la capital (TSJ-CDMX) y a la Asamblea Legislativa (ALDF) les demandó proponer medidas para evitar que los cadáveres se queden sin identificar y, con ello, se manden a la fosa común. También solicitó que se capacite y especialice a educadores de la calle para que realicen campañas de prevención, pues las muertes podrían prevenirse.