Familiares de los 43, una cuarta Navidad fuera de casa y exigiendo justicia en las calles

sábado, 23 de diciembre de 2017 · 21:12
CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- A tres años y casi tres meses de la desaparición de los 43 normalistas de la Normal Isidro Burgos en Ayotzinapa, Guerrero, un grupo de familiares de los estudiantes desaparecidos  marcharon por calles del centro histórico como parte de la su última jornada de lucha del 2017. Padres y madres, con antorcha en mano, y respaldados por una decena de normalistas y simpatizantes caminaron del Hemiciclo a Juárez rumbo al antimonumento ubicado en el cruce de Paseo de la Reforma y la calle de Bucareli. En su tercer día de la jornada que llamaron “43 esperanzas de verdad y justicia”,  Felipe de la Cruz, padre de un normalista y vocero de los 43, explicó que el conjunto de “posadas” que se planearon del 21 al 26  de diciembre son  actos políticos-religiosos que se llevan de manera simbólica, con la intención de continuar con la protesta, ya que este 26 de diciembre se cumplen 39 meses de la desaparición. “Son actividades simbólicas, pero también con la intención de seguir protestando y seguir exigiendo verdad y justicia, para que la gente se dé cuenta de que esto no está resuelto”, mencionó. “En estos meses de lucha no hemos perdido la esperanza, no hemos perdido la fe de encontrar a nuestros compañeros estudiantes de la normal”, refirió Vidulfo Rosales, el abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan en su caminar sobre Avenida Juárez. Los familiares, con las rostros de sus hijos impresas en mantas colgándoles del cuello, llegaron alrededor de las 19:00 horas a la esquina de Bucareli. Vidulfo Rosales tomó la palabra: “Las marchas que hacemos cada 26 de mes son fundamentales para los padres de los compañeros normalistas para no quitar el dedo del renglón en la exigencia de verdad. Es menester conservar la memoria de que en este país no se puede desaparecer y que los gobiernos se vayan a sus casas a vivir tranquilos como si nada hubiera ocurrido”. Después vino el pase de lista a cada uno de los estudiantes. -“Alexander Mora” -“Presentación con vida” -“Antonio Santana” -“Presentación con vida” -“Benjamín Bautista” -“Presentación con vida”... Y finalmente el encendido de las luces de navidad que colocaron en el  antimonumento, un “+43”. “Esa luz es la esperanza por encontrar a nuestros compañeros, simboliza la desaparición forzada, y los miles de asesinatos que se han cometido en nuestros país”, explicó el abogado. Posteriormente madres de familia tomaron el micrófono y señalaron que este año será la cuarta ocasión en que tienen que pasar navidad fuera de sus casas en su búsqueda por el paradero de sus hijos. “No descansaremos, llegaremos hasta el final, hasta saber dónde están nuestros hijos. Seguimos buscándolos donde sea. Van cuatro navidades que no pasamos en nuestras casa, es una tristeza que ahora cada 24, cada fiesta no estemos festejando “, refirió “Conchita”, madre de uno de los normalistas. Los familiares también recriminaron que a pesar de los encuentros que han tenido con representantes de la Procuraduría General de Justicia y de la Secretaría de Gobernación no hay avances en las indagatorias. Este año, quedaron pendientes los resultados de las cuatro líneas de investigación que propuso el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes y  que tienen que ver con la investigación de elementos castrenses del 27 Batallón de Infantería; la detención de policías federales, municipales y ministeriales que llevaron a los estudiantes a Huitzuco; los resultados del análisis de geolocalización y contenido de las conversaciones en los celulares de los desaparecidos, y el trasiego de la droga de iguala a Chicago como móvil de agresión La jornada de lucha continuará mañana con un volanteo en la caseta de Tlalpan y el 25 de diciembre con un acto político en el Café Zapata, en la delegación Benito Juárez. Ayer se reunieron con vecinos de diversas colonias de la zona de Pedregales, en Coyoacán, y participaron en un acto religiosos que se llevó a cabo en la Parroquia del Pueblo de San Pedro Mártir, en Tlalpan. La jornada concluirá el 26 de diciembre con una marcha-procesión rumbo a la Basílica de Guadalupe.

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