CIUDAD DE MÉXICO (apro).– El Centro de Derechos Humanos Zeferino Ladrillero exigió a los gobiernos federal, estatales y municipales que garanticen la seguridad de la aspirante presidencial independiente María de Jesús Patricio Martínez y la de los periodistas que cubren su precampaña. El fin de semana, en Tierra Caliente, Michoacán, cinco reporteros extranjeros que viajaban en la caravana de la también vocera del Congreso Nacional Indígena fueron asaltados por un comando, despojándolos de sus pertenencias. Tras condenar la agresión, José Antonio Lara, coordinador del centro de derechos humanos, expresó especial “preocupación por la integridad de Al Dabi Olvera, quien, además de realizar una labor periodística, es defensor de diversas organizaciones sociales en Estado de México”. Hace unas horas, el Consejo Nacional Indígena del EZLN, la Comunidad Purépecha de Paracho, Michoacán; el Concejo Indígena de Gobierno y la agrupación “Nunca Más un México Sin Nosotros” emitieron un comunicado conjunto en el que condenan el ataque a la caravana de Marichuy. Los firmantes del texto responsabilizaron del ataque “a los tres niveles de gobierno (al presidente Enrique Peña Nieto, al gobernador Silvano Aureoles Conejo y al presidente municipal) y de posibles agresiones” que pueden sufrir las comunidades y pueblos del Consejo Nacional Indígena, la caravana de Marichuy y los periodistas que cubren su precampaña.