WASHINGTON (apro) – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, despidió a Rex Tillerson como Secretario de Estado y lo reemplazará con Mike Pompeo, el todavía director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), anunció el propio mandatario estadunidense. “Mike Pompeo, el director de la CIA será nuestro próximo Secretario de Estado”, informó Trump por medio de un mensaje en su cuenta personal en la plataforma de Twitter. Tillerson, un empresario multimillonario y amigo del mandatario, desde al año pasado se había transformado en una contradicción de la política exterior de la Casa Blanca. Constantemente, Tillerson practicaba un ejercicio de la política exterior con pragmatismo, apegado a la tradición diplomática de Washington. Sin embargo, su articulada estrategia era una autentica contradicción de la ortodoxa práctica de política exterior que profesa Trump. Pompeo “hará un trabajo fantástico. Gracias a Rex Tillerson por su trabajo. Gina Haspel será la nueva directora de la CIA y la primera mujer elegida para ese puesto. Felicidades a todos”, remató Trump en su mensaje matutino de Twitter de este martes, antes de salir para San Diego, California, a supervisar personalmente el prototipo de muro que se construirá en sectores de la frontera con México. El despido de Tillerson era solo cuestión de tiempo. La última confrontación entre la Casa Blanca y al ahora exencargado de la diplomacia estadunidense se dio este lunes cuando, de manera enfática, Tillerson condenó al gobierno del presidente de Rusia, Vladimir Putin, por el asesinato de un espía ruso y su hija en Gran Bretaña. La salida de Tillerson era rumor de casi todos los días en Washington, pues incluso la Casa Blanca lo excluyó casi en su totalidad del trato en las relaciones bilaterales de países como México e Israel, de las que está a cargo Jared Kushner, el yerno del presidente de los Estados Unidos. Según el periódico The Washington Post, fue desde el pasado viernes cuando Trump le pidió a Tillerson la renuncia al Departamento de Estado, mientras este se encontraba de gira en el continente africano. Con Pompeo al frente del Departamento de Estado, la Casa Blanca espera tener una mejor coordinación entre lo que Trump quiere imponer como diplomacia y la tradicional y pragmática política exterior de los Estados Unidos. El director de la CIA es un incondicional de Trump y como Tillerson cuando inicio en el puesto del que ahora fue despedido, carece de experiencia en el ámbito de las relaciones internacionales. Haspel, quien ocupará el puesto de Pompeo, funge actualmente como la subdirectora de la CIA. Las dos nominaciones anunciadas por el presidente Trump en su cuenta personal de Twitter, deben ser ratificadas por la Cámara de Senadores del Congreso federal estadunidense.