GUANAJUATO, Gto., (apro).- Otro policía municipal de Acámbaro fue asesinado la mañana de este lunes junto con su hija adolescente con quien viajaba en su camioneta; es el segundo crimen contra un agente de esta corporación cometido en 10 días. Son ya 19 los elementos de distintas corporaciones acribillados en lo que va del año en el estado, que en el mes de junio fue el segundo con más homicidios dolosos del país, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, y el cuarto con la tasa más alta de este mismo delito. El policía, identificado como Alejandro Rangel, conducía una Meriva gris, acompañado de su hija adolescente, por la Avenida San Antonio de la colonia San Isidro, alrededor de las 7 de la mañana. Otro vehículo los emparejó, y desde él sus ocupantes efectuaron numerosos disparos, asesinando al agente y a su hija. Varios compañeros del policía –quien se encontraba en su día de descanso- acudieron al recibir el aviso de disparos, pero ya no pudieron alcanzar a los responsables. Hace una semana, un policía que fungía como escolta del entonces director de la Policía acambarense murió al repeler un ataque en contra del jefe policíaco en el exterior de su domicilio. Luego de ello, policías hicieron un paro para exigir la salida del director Jaime Nicasio, a quien acusaron de malos tratos, y quien finalmente salió de la corporación. En su lugar se había designado a Pedro Gutiérrez, pero éste renunció debido a que ante su nombramiento se recordaron sus antecedentes, ya que había sido detenido por la Procuraduría de Justicia hace algunos años y acusado de colaborar con la Familia Michoacana, aunque posteriormente obtuvo su libertad. Versiones locales refieren que el policía asesinado este lunes había sido ya encargado de despacho de la Policía Municipal, y se le mencionaba entre quienes eran considerados para hacerse cargo nuevamente de la corporación.