Narcoautos, nueva estrategia para el trasiego de droga
MEXICO, D F, 19 de febrero (apro)- Ante el endurecimiento de los controles de vigilancia en terminales aéreas y puertos marítimos, entre otras puertas de entrada de droga al país, las principales organizaciones del crimen organizado se han visto empujados a buscar nuevos sistemas para burlar los controles policiacos y así poder introducir y comercializar el enervante en México y Estados Unidos
Los dos últimos descubrimientos hechos por la Secretaría de Seguridad Pública y la Procuraduría General de la República (PGR) muestran, en toda su magnitud, el ingenio y, al mismo tiempo, el poder económico de los grupos criminales que operan dentro y fuera de México
El pasado jueves 12, por ejemplo, personal de la PGR destacamentado en el Puerto de Manzanillo aseguró un contenedor ?serie ECMU 191886-8--, procedente de Buenaventura, Colombia, que transportaba camioneta Pick Up, modelo 1990, con placas del estado de México
Personal de la Base de Intercepción Marítima de la Policía Federal (AFI), Armada de México y Aduanas realizó la inspección visual y aparentemente todo estaba en orden
Sin embargo, al realizar una inspección más exhaustiva, los perros adiestrados olfatearon droga oculta en la Chevrolet Silverado, placas MBK 88-12, l del Estado de México
Los policías revisaron entonces la unidad, en busca de algún compartimiento secreto, pero no encontraron nada anormal, por lo que procedieron a desarmar la camioneta casi en su totalidad
Sólo así pudieron dar con la droga, que había sido oculta en 13 componentes del vehículo
En efecto, estribos, salpicaduras y defensas traseras, entre otras autopartes, estaban hechas de pasta de cocaína base y fibra de vidrio En total, 74 kilos 400 gramos de coca
Apenas unos días antes, el pasado 29 de enero, la Policía Federal había aprehendido, en Huixquilucan, Estado de México, a una célula de los hermanos Beltrán Leyva que encabezaba Jerónimo Gámez García, primo de Alfredo Beltrán Leyva
Esta célula vendía droga al menudeo en distintos puntos de la Ciudad de México y del Estado de México y para ello utilizaban un automóvil acondicionado con dos compartimientos ocultos, uno en el tablero y, el otro, en el asiento trasero
De acuerdo con la SSP, ahí ocultaban el dinero de la venta y compra de la droga El auto asegurado es un Bora blanco
Y el 1 de febrero, en el puente internacional Reynosa-Pharr, agentes de Aduanas y Protección Fronteriza descubrieron 17 paquetes de cocaína, con un peso de 19 kilogramos, ocultos en un compartimiento secreto de un Chevrolet que conducía Gonzalo Torres
La droga fue descubierta por un perro adiestrado
Los dos últimos descubrimientos hechos por la Secretaría de Seguridad Pública y la Procuraduría General de la República (PGR) muestran, en toda su magnitud, el ingenio y, al mismo tiempo, el poder económico de los grupos criminales que operan dentro y fuera de México
El pasado jueves 12, por ejemplo, personal de la PGR destacamentado en el Puerto de Manzanillo aseguró un contenedor ?serie ECMU 191886-8--, procedente de Buenaventura, Colombia, que transportaba camioneta Pick Up, modelo 1990, con placas del estado de México
Personal de la Base de Intercepción Marítima de la Policía Federal (AFI), Armada de México y Aduanas realizó la inspección visual y aparentemente todo estaba en orden
Sin embargo, al realizar una inspección más exhaustiva, los perros adiestrados olfatearon droga oculta en la Chevrolet Silverado, placas MBK 88-12, l del Estado de México
Los policías revisaron entonces la unidad, en busca de algún compartimiento secreto, pero no encontraron nada anormal, por lo que procedieron a desarmar la camioneta casi en su totalidad
Sólo así pudieron dar con la droga, que había sido oculta en 13 componentes del vehículo
En efecto, estribos, salpicaduras y defensas traseras, entre otras autopartes, estaban hechas de pasta de cocaína base y fibra de vidrio En total, 74 kilos 400 gramos de coca
Apenas unos días antes, el pasado 29 de enero, la Policía Federal había aprehendido, en Huixquilucan, Estado de México, a una célula de los hermanos Beltrán Leyva que encabezaba Jerónimo Gámez García, primo de Alfredo Beltrán Leyva
Esta célula vendía droga al menudeo en distintos puntos de la Ciudad de México y del Estado de México y para ello utilizaban un automóvil acondicionado con dos compartimientos ocultos, uno en el tablero y, el otro, en el asiento trasero
De acuerdo con la SSP, ahí ocultaban el dinero de la venta y compra de la droga El auto asegurado es un Bora blanco
Y el 1 de febrero, en el puente internacional Reynosa-Pharr, agentes de Aduanas y Protección Fronteriza descubrieron 17 paquetes de cocaína, con un peso de 19 kilogramos, ocultos en un compartimiento secreto de un Chevrolet que conducía Gonzalo Torres
La droga fue descubierta por un perro adiestrado
