"Buena inversión", el rescate de México en el 95: Clinton

miércoles, 23 de junio de 2004 · 01:00
* Pagó mil 400 mdd de intereses a EU, resalta en su autobiografía Mi Vida * Dedica cinco páginas al “error de diciembre” Washington, 22 de junio (apro) - La crisis financiera y económica de México de 1995, fue una prueba de fuego y una "buena inversión" para el gobierno del expresidente de Estados Unidos William Clinton, o al menos él así lo caracteriza en Mi Vida, su autobiografía, y el libro más esperado de este 2004 que, se pronostica, será también el más vendido de los últimos años "El colapso económico de México tendría severas consecuencias para Estados Unidos", escribió Clinton en las cinco páginas dedicadas a la crisis mexicana, de las 957 de su autobiografía Si no ayudaba al gobierno del expresidente Ernesto Zedillo, que acababa de asumir el poder, habría un incremento de 30 por ciento en el flujo de la inmigración mexicana indocumentada, "medio millón de personas más cada año"; los mexicanos no podrían adquirir productos estadunidenses, los narcotraficantes se aprovecharían de un México empobrecido, además de que el impacto de contagio de crisis tendría gran resonancia en América Latina, Rusia, Sudáfrica y los países del centro de Europa, sostiene el exmandatario Ante el tamaño del problema, Clinton describe como Robert Rubin y Larry Summers, secretario y subsecretario del Tesoro, respectivamente, le recomendaron actuar de inmediato y sugirieron pedir al Congreso aprobar una línea de crédito de 25 mil millones de dólares para salvar a México En enero de 1995 tras la estrepitosa devaluación del peso, las reservas de México se habían reducido a 6 mil millones de dólares y tenía al frente cumplimientos de deuda por 30 mil millones de dólares El vencimiento de pago por 10 mil millones de dólares emitidos en tesobonos se cumpliría en el primer trimestre En pago por el crédito de los 25 mil millones de dólares, si los aprobaban en el Capitolio, "México se comprometería a realizar reformas financieras y a reportar a tiempo sobre su estado financiero para evitar que (la crisis) volviera a ocurrir “Ellos (Rubin y Summers) advirtieron, sin embargo, que había riesgos adjuntos a su recomendación: México podría caer pese a todo el apoyo y perderíamos todo el dinero que les diéramos", subraya el expresidente en su libro, en el que hace un recuento de su niñez, su juventud, su lucha de intereses políticos, así como su llegada a la Presidencia, los 8 años que duró su gobierno y los problemas personales y escándalos políticos y sexuales por lo que pasó mientras estuvo en la Casa Blanca, dentro de los cuales destaca el de su "relación inapropiada" con la exinterna Mónica Lewinsky La labor de convencimiento al Congreso y a los estadunidenses sobre la urgencia y necesidad de apoyar financieramente a México fue una labor imposible, Clinton sostiene que el fracaso se dio en parte porque la mayoría de los estadunidenses no entendían las consecuencias del colapso de la economía mexicana, mientras que los legisladores demócratas y los republicanos más conservadores, asumían que la línea de crédito, si se daba, sería la prueba de que no estaba funcionando el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), firmado entre Canadá, Estados Unidos y México En la Casa Blanca y especialmente entre el círculo de asesores de Clinton, había también gente pesimista sobre el caso mexicano, le advirtieron que además de perder el dinero, él podría perder la reelección en los comicios de noviembre de 1996, que finalmente ganó "Cuando George Stephanopoulus (jefe de prensa y asesor político) escuchó la cifra de 25 mil millones de dólares para el préstamo, él pensó que Rubin y Summers habrían dicho 25 millones, pensó que yo me estaba dando de tiros en los pies (Leon) Panetta (jefe de gabinete) apoyaba el crédito; pero me advirtió que si México no nos pagaba eso podría costarme la elección en 1996", subraya Clinton Pese a todo, el expresidente confiaba en su homólogo mexicano "Si alguien podría restaurar a México, ese era Zedillo", escribió Clinton realizó reuniones con líderes demócratas y republicanos del Congreso y aunque éstos le garantizaron que el crédito a México se aprobaría, la oposición era más fuerte y numerosa, y el tiempo pasaba al tiempo que desaparecían las reservas de México Corrían los últimos días de ese enero de 1995, Zedillo estaba desesperado al igual que Rubin y Summers quienes empezaron a formular la idea de actuar unilateralmente, darle a México una línea crediticia procedente del Fondo de Estabilización Cambiaria, creado en 1934 por el Capitolio y del cual podía echar mano el secretario del Tesoro en momentos de crisis con la aprobación del presidente de Estados Unidos, usando su poder constitucional "México tiene unas 48 horas de vida", le dijeron Rubin y Summers a Panneta y a Sandy Berger (jefe del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca) la noche del 30 de enero de 1995 Dos días antes, Guillermo Ortiz Martínez, el secretario de Hacienda y Crédito Público de México, le llamó a Rubin con "gran urgencia" para decirle que "era inminente la moratoria de México" Ese lunes 30 de enero, Clinton cuenta que al regresar de un acto político lo informan de la gravedad del caso, con la novedad de que necesitarían 20 y no 25 mil millones de dólares porque el Fondo Monetario Internacional (FMI) aportaría 18 mil millones de dólares, más los créditos de otras instituciones financieras, se calculaba un paquete de ayuda de 40 mil millones de dólares "Pese a que ellos apoyaban la idea de dar el crédito, Sandy Berger y Bob Rubin otra vez señalaron los riesgos Una reciente encuesta publicada por (el diario) Los Ángeles Times decía que el 79 por ciento de los estadunidenses se oponía a dar la ayuda a México y 18 por ciento la respaldaba “Dije: dentro de un año cuando tengamos a otro millón de inmigrantes indocumentados y estemos inundados de drogas procedentes de México, y que mucha gente de ambos lados del rió Grande haya perdido su trabajo, ¿qué me van a decir? ¿Por qué no hice nada? ¿Qué les voy a decir? Que había una encuesta que decía que el 80 por ciento de los estadunidenses se oponían, esto es algo que tenemos que hacer La reunión duró 10 minutos", describe Clinton en Mi Vida El 31 de enero el expresidente anunció el otorgamiento de la línea de crédito a México por 20 mil millones de dólares, más el paquete de apoyo de las instituciones financieras de crédito Esto último también causó molestia a otros países, especialmente a los del Grupo de los Siete (G-7), los más industrializados del planeta En enero de 1997 México pagó todo el préstamo, con intereses, más de tres años adelante de la fecha del vencimiento (de pago) “México había desembolsado 105 mil millones de dólares de los 20 mil que tenía a su disposición, y pagó un total de mil 400 millones de dólares en intereses el crédito resultó ser no solamente una buena política, sino también una buena inversión", remata Clinton en su descripción de la crisis financiera de México

Comentarios