México, D F- A unos meses de que las diferencias entre el presidente Vicente Fox y el Congreso derivaron en el veto de legisladores a un viaje que el jefe del Ejecutivo pretendía realizar a Estados Unidos, la vocera de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Gloria Abella, descartó que los legisladores se vuelvan a molestar si, como parte de la próxima visita de Fox al país vecino, el presidente mexicano se entrevista de manera inesperada con su homólogo George Bush El Congreso ya aprobó el viaje del presidente a Texas del 26 al 28 de agosto, a partir de la solicitud que hizo y en la que estableció que se entrevistará con el gobernador del estado, Rick Perry, con empresarios locales y tendrá una presentación en el Congreso local Fox también anunció encuentros con grupos académicos y con la comunidad México-Americana, pero no estableció que podría reunirse con Bush Al respecto, Abella expuso en conferencia de prensa que "puede ser que haya esta entrevista", pero de cualquier forma, dijo, se trataría sólo de un ajuste en la agenda presidencial "No tiene por qué haber ningún enfrentamiento entre el Ejecutivo y el Congreso Está perfectamente establecido en la Constitución Mexicana cuáles son las atribuciones de ambos poderes", dijo "El permiso que da el Congreso de la Unión al presidente es para ausentarse del país --agregó, conoce además la agenda" Y es que en una visita a Asia el año pasado, Fox tomó la decisión de hacer una escala inesperada en Mongolia, hecho que junto con la política que tuvo posteriormente con respecto a Cuba provocó que el Congreso vetara el viaje que se había planeado a la Unión Americana para principios de año Abella indicó que tras la visita a Texas y la presentación de su informe de gobierno, Fox partirá el 1 de septiembre a Sudáfrica, donde estará hasta el 5 del mismo mes 08/08/02