El gobierno de Moscú continuará la cooperación nuclear con Irán, pero todos los programas de ese país en ese ámbito deberán estar bajo control de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), señaló el mandatario de Rusia, Vladimir Putin Al concluir la Cumbre del Grupo de los Ocho, en Evián, Francia, el mandatario ruso reiteró su solidaridad con Irán --país al que Estados Unidos ha catalogado como parte del Eje del Mal, junto con Irak y Corea del Norte--: “Irán es nuestro vecino y hemos cooperado y cooperaremos con él” Sin embargo, advirtió que esta colaboración con el régimen de Teherán dependerá de la buena voluntad del gobierno iraní para que ponga sus programas nucleares bajo supervisión de la AIEA Putin aclaró que no busca crear problemas, particularmente en el ámbito comercial, a causa de esta colaboración en materia nuclear Además, señaló que el combate a la proliferación de armas nucleares es un tema que requiere la cooperación de todos los países En tanto, una fuente de la delegación rusa en Evián, dijo a la agencia Itar Tass que la cooperación entre Moscú y Teherán se basa en el uso pacífico de la energía atómica, por lo que está dentro del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares La víspera, el G-8 pidió al gobierno islámico de Irán que se suscriba al protocolo adicional del Tratado, en el que se estipulan inspecciones imprevistas de las instalaciones nucleares Aún no ha habido respuesta por parte del gobierno iraní, pero la solicitud de los países más industrializados del mundo coincidió con el aplazamiento de la apertura de la central núcleoeléctrica de Busherh, al sur de Irán La inauguración de esas instalaciones estaba prevista para fines de 2004, pero surgió la necesidad de sustituir un equipo que lo integra, por lo que su entrada en operación se realizará hasta 2005 03/06/03