JALAPA, Ver., 10 de marzo (apro).- Al calificar como incierto el futuro de las próximas generaciones en México --donde la mitad de la población está constituida por jóvenes--, el escritor Carlos Fuentes consideró que  esta situación puede llevar a quienes tienen menos de 30 años a convertirse en “ninis”—que ni estudian ni trabajan--, a estancarse en el desempleo o, incluso, a  un destino más trágico: ser parte del crimen organizado.
    En las conclusiones de la cátedra que lleva su nombre en la Universidad Veracruzana (UV), a donde  acudieron otros intelectuales latinoamericanos, el autor de Terra nostra se refirió a la falta de oportunidades para los jóvenes mexicanos.
    Fuentes hizo una defensa de la imaginación, la historia, la diversidad y la identidad; esta última, subrayó, “significa saber quiénes somos y luego buscar la diversidad, que significa saber cómo somos con los demás”.
    “La historia nos ayuda a comprender el pasado y la imaginación nos ayuda a crear el futuro. La imaginación y la historia son maneras complementarias del saber”, subrayó ante los asistentes, en su mayoría universitarios, concentrados en las instalaciones de la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información de la UV.
    En su extensa disertación, el novelista señaló que en  México, como en otros países, la cultura es relevante, ya que viene a suplir vacíos  dejados por ausencias políticas, económicas y sociales.
    La imaginación, remarcó, “es una realidad del espíritu humano que se niega a sacrificar o excluir cualquier posibilidad de la existencia, en tanto se genera constantemente y siempre es un problema cargado de peligros y de oportunidades, porque no sólo es una colección de hechos, sino un horizonte de posibilidades”.
No es la primera vez que México  enfrenta retrasos notables en lo social y económico, y cada vez más “se está reiterando una tendencia con el deseo de que con la vida política y económica se alcance la continuidad y el poder de la vida cultural”.
Hoy, apuntó, “sabemos sobre el pasado y la historia”, pero ignoramos lo que va a pasar, “y sin embargo estamos ciertos de que algo va a pasar” y, en este caso, preguntó si en México se están dando las oportunidades que el país merece.
“Éste es un país de jóvenes, donde la mitad tiene 30 años o menos, y uno se pregunta por el destino de ellos, que bien puede ser el de ‘ninis’, los estanque en el desempleo o, más trágico, aquel que por facilidad o por fortuna (dinero), los lleve al crimen organizado”, subrayó.
En entrevista posterior se le preguntó sobre la sucesión presidencial del 2012. Fuentes consideró que ningún partido político le está dando soluciones al país, “pues la realidad social es otra y no la pueden manejar; en este sentido, creo que estamos en una época en la que nadie sabe cuál va a ser el futuro”.
En el acto, presidido por el rector de la UV, Raúl Arias Lovillo, y  al asistió el ex gobernador Miguel Alemán Velasco, también dictaron sendas conferencias el escritor argentino Natalio Botana y el historiador mexicano Enrique Florescano.
Este último calificó de negativos los resultados de la conmemoración del Bicentenario de la Independencia y Centenario de la Revolución Mexicana, ya que los responsables de organizarla “carecen de una visión histórica del desarrollo nacional y su proyección en el mundo”.
En su exposición, precisó que el gobierno de Vicente Fox y luego el de Felipe Calderón “titubearon y se equivocaron al hacer los nombramientos que requería la empresa abocada a conmemorar los 200 años de experiencia republicana y 100 años del inicio de la revolución que transformó la historia contemporánea de México”.
En su conferencia, denominada “Memoria y centenarios mexicanos”, Florescano insistió en que estas falla de origen “dieron pie a un proyecto sin rumbo, al fracaso de las obras monumentales anunciadas y a la desorganización que hizo explosión ante la escalada de inseguridad, violencia y temor que sembraron los enfrentamientos contra el narcotráfico”.