GUANAJUATO, Gto. (apro).- Por unanimidad, el Congreso estatal aprobó una reforma el Código Penal para tipificar el feminicidio, con lo que a partir de ahora quien cometa homicidio de una mujer “y ésta sea incomunicada o violentada sexualmente, vejada o mutilada o haya existido violencia intrafamiliar del activo contra ella” será castigado con una pena de 35 años de prisión. Sin embargo, en la misma sesión, la mayoría panista rechazó la minuta enviada por el Senado para reformar el capítulo primero de la Constitución en materia de derechos humanos, al desechar el término explícito sobre respeto a “las preferencias sexuales”. “Si modificamos el texto por ‘preferencias sexuales’, se corre el riesgo de circunscribirnos sólo a éstas, dejando fuera a todas aquellas preferencias de tipo social, político, cultural, civil o cualquier otra, que también son parte del individuo y deben respetarse tanto como las preferencias sexuales, y por ello no se estima conveniente dicha modificación”, se argumentó en el dictamen que por cierto PRI y PRD votaron en contra. Sobre la sanción penal para el feminicidio, de hasta 35 años de prisión, corresponderá al homicidio calificado, de acuerdo con el dictamen que se sometió hoy a votación en el pleno de la Legislatura local. Aunque en un principio la redacción del artículo 153-a estaba en estos términos, “Habrá feminicidio cuando la víctima sea mujer y se le mutile o se le torture, se le denigre o se le violente sexualmente, antes o después de privarle de la vida”, más tarde se le hizo una modificación a propuesta de la diputada priista Alicia Muñoz Olivares, la cual contó con el respaldo de todos los legisladores de PAN, PRI, PRD, Nueva Alianza (Panal) y Partido Verde Ecologista de México (PVEM). No obstante, organizaciones de la sociedad civil habían solicitado que se pospusiera la tipificación del feminicidio, al considerar que se pretendía legislar apresuradamente y sin un análisis más amplio. Según el diputado priista Luis Gerardo Gutiérrez Chico, presidente de la Comisión de Justicia, el tipo penal aprobado “recoge las propuestas e inquietudes de diversos actores sociales y busca prevenir y erradicar las formas de violencia contra las mujeres”. Sin embargo, los diputados rechazaron establecer el feminicidio como un homicidio “por razones de género”, al considerar que el término “adolece de imprecisión y vaguedad” y ello contribuiría a la impunidad de estos ilícitos. Según los legisladores, la descripción de conductas como la mutilación o la violencia sexual, son una expresión objetiva sobre lo que se puede entenderse como “razones de género”.