OAXACA, Oax. (apro).- El subsecretario de Derechos Indígenas, Zenén Bravo Castellanos, renunció hoy a su cargo con el argumento de que la dependencia es un “elefante blanco” que carece de recursos económicos para operar. Con ésta son cuatro los funcionarios de primer nivel del gabinete estatal que han renunciado a sus cargos en los seis meses que va de la actual administración que encabeza Gabino Cué. El primero en renunciar por la falsificación de su título fue el entonces secretario de Turismo y Desarrollo Económico, Alfredo Ahuja Pérez; le siguió el secretario de Asuntos Indígenas, Adelfo Regino Montes, para poder titularse; luego, el director Jurídico de Gobierno, Mario Emilio Zárate Vásquez, a quien se le relacionó con el fundador de Los Zetas, Flavio Méndez Santiago, El Amarillo. El único que regresó al cargo ha sido Adelfo Regino Montes luego de que se tituló para cumplir con los requisitos que establece la Ley Orgánica del Poder Ejecutivo. Bravo Castellanos, también dirigente del Frente Popular Revolucionario (FPR), exdiputado local y consejero de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), denunció también que la Secretaría de Asuntos Indígenas mantiene en su estructura a funcionarios vinculados con el exgobernador Ulises Ruiz Ortiz. Aunque percibía un salario mensual de 43 mil pesos, Zenén Bravo  se quejó de que no había recursos ni para el rescate de las lenguas indígenas, la medicina tradicional y otros programas. Lamentó que el gobierno aliancista desoyera la petición que hizo la Secretaría de Asuntos Indígenas (SAI) de ejercer 60 millones de pesos para apoyar a las comunidades, pues sólo cuenta con 14 millones de pesos, los cuales, en su mayoría, son utilizados para el pago de la nómina, talleres y foros.