MÉXICO, D.F. (apro).- La ola de violencia atribuible al crimen organizado dejó un saldo de al menos 21 muertos en Nuevo León y Jalisco. Sólo en Nuevo León el crimen organizado sembró el terror desde las primeras horas del día, al perder la vida 15 personas en distintos puntos de la entidad. Por la mañana, una denuncia anónima reveló a efectivos de la Séptima Zona Militar la ubicación de una casa de seguridad en el municipio de Pesquería, donde fueron rescatadas tres personas y cinco presuntos delincuentes murieron, entre ellos una mujer; tres más fueron detenidos, informaron fuentes castrenses. El operativo militar ocurrió después de las 10:00 horas en calles de la colonia Jesús María, en Pesquería, municipio ubicado a más de 35 kilómetros al noreste de la zona metropolitana de Monterrey. Al acudir a verificar la denuncia, los militares descubrieron una camioneta con varios hombres armados, quienes intentaron huir disparando contra los soldados. En el intercambio de tiros murieron cuatro hombres y una mujer. Además, otros tres presuntos delincuentes fueron detenidos. Los militares también liberaron a dos mujeres y un hombre. Casi al mismo tiempo fueron localizados los cuerpos mutilados de dos hombres en el municipio metropolitano de Guadalupe, a quienes se identificó como escoltas del gobernador Rodrigo Medina. Al lado de las víctimas se dejó un ‘narcomensaje’ con amenazas al Ejecutivo estatal. El portavoz de la Policía de Guadalupe destacó que los dos cuerpos mutilados fueron abandonados en el estacionamiento de una cadena comercial ubicada en el cruce de las calles Arteaga y Chapultepec. Los cadáveres fueron dejados en una bolsa y una de las cabezas adentro de un recipiente. Elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) que arribaron al lugar identificaron los cadáveres como miembros de elite de la Policía Estatal, a quienes de acuerdo con las autoridades se les conocía como El Cabrito y El Negro. Y otras cuatro personas mutiladas fueron abandonadas esta mañana en diversos puntos de la zona metropolitana de Monterrey y otro más fue asesinado con arma de fuego. El Consejo de Seguridad estatal confirmó que los tres cuerpos mutilados que fueron abandonados a escasos metros de la entrada principal de la prisión de Cadereyta eran celadores de la cárcel que presuntamente fueron secuestrados el pasado lunes por hombres armados. Aproximadamente a las 07:00 horas fue localizado otro hombre decapitado en calles de la colonia San Jerónimo, al poniente de Monterrey. Minutos después, efectivos de la AEI acudieron a la colonia Dos Ríos, también de Guadalupe, donde encontraron un hombre atado de las manos y con disparos de arma de fuego en el pecho. Por la tarde, tres jóvenes fueron ejecutados a espaldas de una escuela en la colonia Florida, al sur de Monterrey. Las víctimas, no identificadas, perecieron a balazos en la cabeza y el tórax a las 16:45 en la banqueta de la calle Anastasio Parrodi, casi esquina con Aquiles Serdán, en la parte trasera de la primaria “Rómulo Garza”. Los asesinos echaron gasolina en los cadáveres y les prendieron fuego, aunque las llamas sólo alcanzaron a quemar algunas prendas de los hombres abatidos. En Jalisco, un total de seis muertos, 10 detenidos y varias unidades de lujo aseguradas fue el saldo de la balacera registrada en el municipio de San Cristóbal de la Barranca, cerca de la localidad de La Lobera, según confirmó la Secretaría de Seguridad Pública estatal el martes por la noche.