WASHINGTON (apro).- El Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció este lunes la aplicación de un control “limitado” en los estados que colindan con México, para la venta múltiple de rifles semi-automáticos con cargadores intercambiables. James Cole, el suprocurador de Justicia del gobierno de Barack Obama, anunció por medio de un breve comunicado de prensa que la regulación se aplica como una medida para contener la violencia que están generando las organizaciones trasnacionales del crimen organizado. Por esta razón, en los estados de Arizona, California, Nuevo México y Texas, las armerías están obligadas, a partir de ahora, a reportar al Buró de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés), a cualquier persona que haga más de una compra múltiple de rifles semi-automáticos en un periodo de cinco días. “Agencias federales, estatales y extranjeras han determinado que cierto tipo de rifles semi-automáticos, de un calibre más alto que el .22 y con la capacidad para aceptar cargadores intercambiables, son altamente solicitadas por peligrosas organizaciones del tráfico de drogas y a lo largo de la frontera sur, frecuentemente recuperadas en escenarios de crímenes”, señaló Cole. La decisión anunciada por el subprocurador Cole, aun cuando prohíbe la a una misma persona hacer compras múltiples de rifles semi-automáticos en un plazo menor de cinco días, no prohíbe adquirir cualquier tipo de armamento ni limita el calibre. Además, luego de los cinco días de límite, nada impide a una misma persona volver a comprar varios rifles de alto poder. “Este nuevo mecanismo de denuncias, que se concentra únicamente en la venta múltiple de estos tipos de rifles a la misma persona en un período de cinco días, mejorará la capacidad de la ATF para detectar y desmantelar las redes del tráfico de armas, responsables de tergiversar el comercio legal de armas para que las adquieran delincuentes y organizaciones criminales”, anotó Cole. El anuncio de la nueva regulación para la venta de armas en los cuatro estados fronterizos con México se da justo cuando el Departamento de Justicia realiza una investigación sobre la operación “Rápido y Furioso”, por medio de la cual la oficina de ATF en el estado de Arizona, contrató a traficantes de armas para que hicieran compras múltiples de todo tipo de armas en la ciudad de Phoenix. La idea original de la ATF es rastrear el movimiento de las armas compradas bajo el operativo “Rápido y Furioso” para llegar al fondo del trafico ilegal de armas. La ATF perdió el control de los compradores de armas múltiples que reclutó, y unas 2,500 armas terminaron en México, en manos de narcotraficantes. En el Congreso estadunidense también se está haciendo una investigación independiente para aclarar el caso de “Rápido y Furioso”, y con ello fincar responsabilidades a los autores intelectuales del fracasado proyecto, incluso de las principales cabezas del Departamento de Justicia, del cual depende la ATF. “Esta solicitud de información sobre compras múltiples se instrumentará en Arizona, California, Nuevo México y Texas, y ayudará a confrontar el problema del tráfico ilegal de armas dirigido a México y que se realiza a lo largo de la frontera sur (de Estados Unidos)’, remató el subprocurador.