MÉXICO, D.F. (apro).- Designado por Barack Obama para asumir el cargo de embajador de Estados Unidos en México, Anthony Wayne cumplió hoy con el protocolo y compareció ante la audiencia de confirmación del Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadunidense. El diplomático se comprometió a acelerar la ejecución de la Iniciativa Mérida, sin descuidar la relación económica que comparten ambas naciones. A la fecha, el gobierno de Obama ha entregado 465 millones de dólares de los mil 400 millones a los que se comprometió en el marco de la Iniciativa Mérida, para apoyar los esfuerzos antinarcóticos iniciados en 2006 por el presidente Felipe Calderón, que han dejado alrededor de 50 mil muertos. De acuerdo con Wayne, entre sus primeras acciones estaría la de apoyar a los gobiernos locales y estatales en cuya jurisdicción han ocurrido la mayoría de crímenes a manos de la delincuencia organizada, y que se esforzaría para impedir el tráfico ilegal de armas y de dinero en efectivo hacia México, además de que fortalecería el consenso en la lucha antinarco. "Pienso que de ser confirmado, una de las primeras cosas que trataría de hacer es mantener y fortalecer el consenso en esta batalla contra organizaciones transnacionales", dijo Wayne, quien hasta junio pasado fungía como el número dos en la Embajada de EU en Afganistán. Durante la audiencia de confirmación, el exsubsecretario de Estado para asuntos económicos añadió que su meta sería demostrar con hechos la importancia del factor económico en una relación bilateral, cuyo aspecto más visible, dijo, es la seguridad. Si se confirma el nombramiento, Wayne tomará el lugar de Carlos Pascual, quien renunció en marzo de 2011, después de que Wikileaks publicó cables diplomáticos en los que el embajador se expresaba de manera crítica sobre la estrategia diseñada por el gobierno de Felipe Calderón contra el crimen organizado. A raíz de la difusión de dichos cables, el mandatario mexicano reprobó los comentarios e incluso pidió la renuncia del funcionario estadunidense. Nominado el 8 de junio por Obama, Wayne –de 61 años y miembro del Servicio Exterior de EU desde 1975, en el que goza del más alto rango de “embajador de carrera”– deberá esperar otra reunión del Comité en la que será votada su nominación, que de ser exitosa aún deberá ser turnada al pleno.