CHILPANCINGO, Gro. (apro).- Luego de 25 días de mantener cerradas cerca de 800 de los mil 100 planteles escolares de nivel básico, en protesta por la inseguridad y violencia, profesores de Acapulco acordaron regresar a clases el próximo lunes. La decisión fue tomada durante una reunión con el gobernador Ángel Aguirre Rivero. Sin embargo, un grupo de representantes sindicales vinculados al magisterio disidente, rechazaron este acuerdo, pues insistieron que no existen garantías para reanudar labores porque las autoridades de los tres niveles de gobierno no han cumplido con el compromiso de revertir el ambiente de impunidad que se vive en el puerto. El acuerdo fue suscrito por 78 de los 80 representantes sindicales que se reunieron durante una hora y media con el Ejecutivo estatal en un salón del hotel Crown Plaza, ubicado en plena avenida costera Miguel Alemán. El término del encuentro, que comenzó a las 18:30 horas, la vocera del movimiento, María Zurita Petatán, señaló que aceptaron regresar a clases, a pesar de que persisten los hechos violentos en el puerto, porque “confían” en la palabra de las autoridades. Dijo que regresarán a las aulas con “miedo”; y que esperan que el gobierno, en sus tres niveles, haga lo que le corresponde para garantizar la seguridad de los trabajadores de la educación, los alumnos y padres de familia. La vocera magisterial señaló que dependerá de cada plantel definir el mecanismo