MONTERREY, N.L. (apro).-El delantero chileno de Rayados de Monterrey, Humberto Suazo Pontivo desistió de su interés por emigrar a otro país y la mañana de este lunes se sumó al primer equipo después de permanecer marginado durante los primeros cuatro encuentros de la temporada. Tras reconciliarse con la directiva, con la que estaba públicamente peleado, el goleador participó esta mañana en el entrenamiento del equipo en las instalaciones deportivas ubicadas en Valle Alto, donde no hubo acceso a los medios de comunicación. Mediante un boletín difundido esta mañana, la directiva señala que El Chupete renunció a su pretensión que había manifestado desde diciembre, cuando el equipo regresó del Mundial de Clubes, en Japón, donde tuvo una desafortunada participación. Dice textualmente el comunicado dado a conocer esta mañana: “Tras reunirse con directiva y cuerpo técnico por iniciativa propia, el jugador Humberto Suazo manifestó la tarde de ayer su intención y disposición de sumarse al trabajo con el primer equipo. Como resultado de dicha reunión, Humberto Suazo se incorpora hoy a la actividad con el plantel para ponerse a disposición del cuerpo técnico”. El club afirma que el jugador queda ligado a la institución “descartando cualquier posibilidad de ser transferido a otro club”. De esta manera, termina la telenovela con el ariete que permanecerá con Monterrey hasta el 31 de junio del 2013, día en que expira su contrato. Tras el anuncio, el defensa albiazul Sergio “Cherokee” Pérez manifestó en su cuenta de Twitter su beneplácito por la incorporación de Suazo: “Todos en el vestidor te podemos decir que Humberto Suazo es un tipazo. Se extrañaban sus bromas y talento”. El reencuentro de Suazo con la directiva ocurre un día antes de que a nivel internacional cerrara el plazo para las contrataciones de los torneos de inicio de año. Si no se contrataba con nadie, ni conciliaba sus intereses con los de Rayados, la directiva lo boletinaría ante la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) para inhabilitarlo. El jugador entrenaba desde enero en las instalaciones de El Cerrito con el equipo sub 20, a donde la directiva lo había enviado en castigo por manifestar su deseo de emigrar hacia el futbol sudamericano, con el argumento de que deseaba estar más cerca de su madre enferma, radicada en Chile. El 10 de enero, Suazo dijo que las relaciones con la directiva estaban definitivamente rotas, al señalar que mentían al acusarlo de incumplido. Dijo el chileno ese día: “La verdad los directivos se han llenado la boca diciendo cosas, barbaridades y todo. He dado mucho a la institución y no merezco este trato. Ellos siempre van a decir lo que les conviene y yo tengo lo que se ha mandado. Han dicho que a nadie van a tener obligado y creo que se contradicen. Uno obligado no va a hacer las cosas bien”. Desde entonces, hubo acercamiento de algunos clubes de Sudamérica que se aproximaron para negociar con la directiva de La Pandilla, pero ninguno se aproximó al precio de 6 millones de dólares que solicitaban por su transferencia. Luis Miguel Salvador, vicepresidente del equipo dijo entonces que El Chupete emigraría únicamente si algún club lo compraba, pues no lo dejarían salir en calidad de préstamo.