MÉXICO, D.F. (apro).- La publicación de fotografías “provocativas” por parte de menores de edad con acceso a Internet muestra números alarmantes: uno de cada tres niños entre los 12 y 18 años ha publicado imágenes suyas en la red sin conciencia de las consecuencias. Según datos del Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (IFAI), el problema es grave, pues el universo de internautas en ese rango de edad es de alrededor de 10 millones de jóvenes, por lo que serían alrededor de 3.6 millones de adolescentes los que han publicado imágenes en “poses provocativas”. De acuerdo con el comisionado del IFAI, Ángel Trinidad Zaldívar, de los menores que tienen acceso a Internet, la mitad tiene la computadora en su habitación, además de que del total, 30% no tiene reparo en publicar datos personales, como dirección, teléfono, nombre de la escuela y datos familiares. El comisionado consideró urgente que se genere una cultura de la protección de datos personales que debe iniciar desde el sistema educativo. “Cada día dejamos un largo rastro de información personal, consultamos páginas de Internet, enviamos correos electrónicos, hacemos compras con tarjeta de crédito, llamadas desde nuestro celular y, gracias al flujo de información, grandes compañías obtienen al mes un promedio de 2 mil 500 detalles de cada uno de nosotros”, dijo citando el dictamen que dio origen a la Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de los Particulares. Trinidad Zaldívar aportó un dato revelador: 43% de los adolescentes no considera peligroso acudir a una cita con alguien que conocieron por Internet. El comisionado sostuvo que los retos para la protección de datos personales en el país son grandes, por lo que el Estado debe proveer leyes e instituciones que garanticen la información personal. También se pronunció a favor de la iniciativa de reforma a la Ley General de Educación, para que se incluya en los planes de estudio y de manera obligatoria el tema de la protección de datos personales, que se encuentra actualmente estancada en la Cámara de Diputados.